El voto militar se inclina por la dupla Milei-Villarruel
El oficialismo corre detrás en las preferencias del electorado militar. Sergio Massa cuenta con su compañero de fórmula, Agustín Rossi, creador del Fondo Nacional de la Defensa (FONDEF) pero Javier Milei tiene el apoyo de las “damas de hierro”, Patricia Bullrich y Victoria Villarruel.
“En las primarias abiertas (PASO) la tendencia mayoritaria del voto de la familia militar se dividió entre los apoyos para Patricia Bullrich y Javier Milei. Hoy, tras la derrota de Juntos por el Cambio, esos votos, probablemente, se trasladarán en gran número a La Libertad Avanza, aunque muchos tengan dudas acerca del funcionamiento de las fuerzas armadas durante un hipotético gobierno de Javier Milei”, comentó un asesor del ministro de Defensa, Jorge Taiana.
En principio podría creerse que todo se trata de una cuestión de afinidad ideológica con la dirigente nacionalista y conservadora Victoria Villarruel que acompaña en la fórmula al economista liberal de La Libertad Avanza, Javier Milei.
Pero, en realidad, los militares en actividad piensan en otras reivindicaciones, más materiales. Salarios, por ejemplo, y más presupuesto para adquirir material que sirva a la defensa del territorio nacional, que las consignas y el debate abierto acerca de la última dictadura militar que preocupa a los oficiales retirados.
Si bien, las preocupaciones son diferentes, las dos generaciones de uniformados parecen confluir en un voto positivo para la fórmula de la Libertad Avanza en detrimento del binomio de Unión por la Patria.
Antes de analizar los factores, repasemos los números de las recientes elecciones de este año.
Uno de los primeros datos que llegan son las mesas donde votan los efectivos que se encuentran en las bases antárticas. Allí, la fórmula de la Libertad Avanza se impuso en las PASO y en las generales de octubre.
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Milei- Villarruel consiguieron el 63% de los votos en agosto y en octubre el porcentaje aumentó hasta el 68,8%. En esa ocasión, Patricia Bullrich- Luis Petri, de Juntos por el Cambio obtuvieron un 22,1% mientras que Sergio Massa- Agustín Rossi, contabilizaron un magro 4%.
Desde luego que, electoralmente, la votación en la Antártida no contiene a todo el universo de la familia militar compuesta por cerca de 95.000 efectivos en actividad, pero será un dato significativo para analizar, luego de la votación del 19 de noviembre, si la candidatura de Milei creció en votos por la posible y, probable, traslación de los sufragios de aquellos que votaron a Bullrich, ya fuera de carrera, y terminaron eligiendo la propuesta de la Libertad Avanza.
Fuentes militares con responsabilidad de mando en las tres armas principales, aseguraron a NA que, en los cuarteles el voto militar y, su área de influencia, o sea, sus familiares directos, se inclinarán de manera decidida por Milei- Villarruel ante la derrota de Bullrich-Petri y, a pesar de los esfuerzos del gobierno por atender las necesidades de los uniformados.
En ese sentido, “muchos de los oficiales conocen la difícil situación económica de la Nación y la imposibilidad de trabajar con materiales necesarios para la defensa del país” pero “la crisis inflacionaria también perjudicó el ingreso de la tropa”, aseguraron las fuentes militares consultadas.
Desde el ministerio de Defensa que conduce Jorge Taiana llegaron soluciones de último minuto.
El 1 de noviembre, en una decisión consensuada con el ministro-candidato, Sergio Massa, se estableció un tercer tramo de la jerarquización salarial para las Fuerzas Armadas del orden del 12%.
Una resolución publicada en el Boletín Oficial y que forma parte de un paquete de aumentos otorgados en tramos, en el que quedan pendientes para el 2024, dos cuotas de 10% del proceso de jerarquización, que permitirá incrementar los ingresos en un 60%.
Este esfuerzo de Tesorería intenta combatir la caída adquisitiva de los salarios producidos por la devaluación de la moneda nacional y su constante pérdida de valor.
Es uno de los factores con los que el oficialismo intenta revertir una tendencia desfavorable en los sondeos previos a la elección definitiva.
Otro de los factores importantes, que estará presente en el debate televisivo entre los dos candidatos a suceder a la actual Vicepresidenta, Cristina Fernández, será el presupuesto necesario para equipar a las fuerzas armadas cuya misión es clara pero que enfrenta graves problemas de caja.
Tanto Agustín Rossi como Victoria Villarruel tendrán ocasión de defender sus posturas acerca de temas militares e, indudablemente, el actual Jefe de Gabinete de Alberto Fernández, podrá enseñar como un logro de su oficina, la creación del Fondo Nacional de Defensa (FONDEF), aprobado en el año 2020 mediante la Ley Nª 27.565 y que tiene por objetivo financiar el proceso de reequipamiento de las Fuerzas Armadas, mediante la recuperación, modernización e incorporación de material, a través del 0,8% del Presupuesto Nacional.
A pesar de la vigencia de la ley, la administración de Alberto Fernández finaliza su gestión sin poder adquirir aviones de combates cazas para la Fuerza Aérea o blindados para el Ejército nacional.
En un reciente discurso público realizado en la sede de la IV Brigada Aérea en la provincia de Mendoza, durante el mediodía del miércoles 25 de octubre, el ministro Jorge Taiana, señaló, respecto a las restricciones presupuestarias para equipar con tanques al Ejército, “Esto está avanzado, estamos en las últimas conversaciones referidas a los seguros-contraseguros. Cualquiera sabe que la situación financiera de la Argentina es de alguna manera frágil y eso hace que las conversaciones sobre los contraseguros o reaseguros para los vehículos blindados a rueda sea un proceso que se está llevando adelante", y agregó: Esperemos que termine pronto, sin duda el proceso electoral también de alguna manera ralentiza los términos de las posibilidades de financiamiento porque quieren esperar un poco, muchas veces ver el resultado.“
Una explicación similar para la compra de los cazas, aeronaves de ataque de cualquier Fuerza Aérea que se precie de serlo, por las que afirmó, que aún se están evaluando aspectos técnicos, financieros, legales y de oportunidad geopolítica de los tres candidatos finales.
Lo cierto es que en los últimos cuatro años se avanzó en el proceso de planificación y planeamiento como revela el Plan Camil, de capacidades militares, junto a la financiación del FONDEF pero, al mismo tiempo, quedo demostrado que no todos los fines necesarios para defender el territorio nacional se alcanzaron, precisamente, por falta de medios financieros acordes.