Con una amplia mayoría, el oficialismo logró convertir en ley el proyecto de "zona fría"
Incluirá descuentos de entre el 30 y el 50% en las facturas de gas de usuarios residenciales que vivan en localidades con bajas temperaturas. Se calcula que el beneficio alcanzará a casi 4 millones de hogares.
Con una importante diferencia de votos, el oficialismo logró convertir en ley el proyecto de "zona fría", que amplía el régimen de beneficios en las tarifas de gas para usuarios residenciales, con descuentos de entre un 30 y un 50%, incorporando nuevas provincias y localidades que registran bajas temperaturas.
La iniciativa, que cosechó 51 votos afirmativos y 12 negativos, permitirá la incorporación de 3.140.000 de nuevos usuarios con tarifa diferencial por zona fría, pasando así a un total de prácticamente 4 millones de beneficiarios.
El régimen ya se encuentra vigente en la Patagonia (incluida La Pampa), en Malargüe (Mendoza) y en un sector de la Puna, con un total de 849.965 beneficiarios.
La iniciativa extenderá el beneficio a localidades de Mendoza, San Juan, San Luis, Salta, Córdoba, La Rioja, Salta, Tucumán y Catamarca, además de cincuenta municipios de la
provincia de Buenos Aires con clima frío o templado-frío.
De acuerdo al Gobierno, el beneficio generará un "alivio" en las facturas de gas que paga el 28% de la población, llegando así a un 44% de los usuarios residenciales de todo el país.
El gasto fiscal que demandará esta medida se financiará con un recargo sobre el precio del gas natural en PIST aplicable al volumen comercializado en el país, no pudiendo superar el 7,5%".
Actualmente el nivel del recargo se ubica en 4,46%, y se prevé que este año haya una suba de un punto porcentual, llegando al 5,44%, lo que generaría un aumento en las facturas de los usuarios no alcanzados por el régimen de "zona fría" de apenas un 0,5%.
"La ampliación del régimen para zonas frías no requiere aportes del Tesoro y significa un beneficio para casi 4 millones de hogares", destacó el sanjuanino Rubén Uñac (Frente de Todos).
En sentido contrario, el jefe del bloque del PRO, Humberto Schiavoni, aseguró que la medida tendrá "un reflejo presupuestario" y que solamente el 13% del costo fiscal será trasladado a las facturas, lo que implicará un aumento considerable del volumen de subsidios.
"Esta medida no discrimina entre hogares con posibilidad de pagar una tarifa representativa de los costos y aquellos hogares que no tienen esa posibilidad. No es un subsidio focalizado, sino que está armado en función de una zona geográfica con bastante arbitrariedad en su elección. Es probable que en algunas de las zonas escogidas hayan temperaturas bajas pero no lo es todo el año, como sí suceda en las zonas patagónicas ya comprendidas", advirtió el misionero, al fundamentar su rechazo al proyecto.
El chubutense Juan Mario Pais (Frente de Todos) contradijo a la neuquina al sostener que "esto no es un subsidio del Estado" sino "un fondo compensador que pagan los propios consumidores".
"Los argentinos saben perfectamente que nada es gratis, que los servicios no se regalan", dijo por su parte la senadora mendocina Pamela Verasay, que añadió: "Los subsidios generalizados principalmente benefician a los sectores de altos ingresos".
En la misma línea de argumentación, Laura Rodríguez Machado (PRO) consideró que "esta es una ley absolutamente injusta porque genera una gran desigualdad".
"Es un subsidio a una mancha generalizada donde no se distingue quienes lo necesitan de verdad y quienes no", añadió la cordobesa.
La jujeña Silvia Giacoppo (UCR) se diferenció de la postura de rechazo que adoptó un sector de Juntos por el Cambio y destacó que "las medidas propuestas tienen la finalidad de garantizar la igualdad real entre habitantes de todo el país".
"Celebro que los pedidos de los diputados de mi provincia, de mi espacio político, hayan tenido la posibilidad de solicitar la inclusión de Jujuy", resaltó.
Jorge Taiana (Frente de Todos) valoró que con esta iniciativa se esté "ampliando la geografía y la población que va a recibir un beneficio, distinto al del resto de la población, por el hecho de tener que vivir en zonas frías".
En el cierre de Juntos por el Cambio, el jefe de ese interbloque, Luis Naidenoff (UCR) planteó como una "inmoralidad" que a través de un subsidio "no focalizado se beneficie a aquellos que "están en condiciones de afrontar el pago de la factura en pandemia, cuando se pierden trabajos".
"Vamos a beneficiar al señor de Las Leñas, al de Cumelén, al que le está yendo muy bien en Villa La Angostura", lamentó el formoseño.
El radical reconoció que fueron "un error los tarifazos" del Gobierno de Cambiemos pero remarcó que "repetir la historia de la indiscriminación de subsidios" es "una pésima decisión".
"Está bien tender la mano al que necesita. Pero esto no. El subsidio tiene que ser focalizado. Si hay que importar, que se importe para el que necesita. Esto es una inmoralidad", sentenció.
El porcentaje de descuento sobre la tarifa plena de la factura de gas dependerá de la vulnerabilidad económica de los usuarios.
La reducción general para usuarios de zonas frías será del 30%, pero el porcentaje crecerá al 50% en el caso de usuarios que estén comprendidos en algún programa social del Gobierno como la Asignación Universal por Hijo (AUH) o la Asignación por Embarazo.
También quienes perciban pensiones no contributivas y jubilados de hasta cuatro salarios mínimos, trabajadores inscriptos en el monotributo social, personas que reciben seguro de desempleo y empleados de casas particulares.
A su vez, estarán contemplados en el beneficio quienes estén exentos en el pago de ABL o tributos locales de igual naturaleza o los que tengan una pensión vitalicia como veteranos de la Guerra del Atlántico Sur.