La vicepresidenta, con un video que avanza con un tinte intimidatorio, intenta nuevamente ejercer presión sobre la Justicia. En este caso, principalmente, sobre la CSJN, tratando de descalificar a alguno de sus jueces.

Esto se remonta a los procesos judiciales que tiene Cristina frente a la Justicia, uno de los cuales está en etapa de juicio oral con alegatos próximos y, seguramente, con una sentencia que habrá que ver qué contenido tiene hacia fin de año o principios del que viene.

Este ataque de Cristina contra la Justicia, y contra la CSJN en particular, debe entenderse en el marco de un anhelo que ha tenido siempre el kirchnerismo de tener control sobre el sistema judicial, cuando en realidad la tarea de la Justicia es casualmente controlar a los otros poderes, a los poderes políticos, juzgar en caso de que hubiera casos de corrupción y también poner límites en los avances del poder político y del Estado sobre la población. Eso siempre genera tensiones en todos los países del mundo. Acá, lamentablemente, esas tensiones nos llevan por estos caminos; ataques, agravios que, en definitiva, ponen en crisis el sistema republicano en el cual nos debemos regir. En este momento atravesamos una grave crisis no solo económica sino también institucional.

Esperemos que el oficialismo, en todas sus ramas, tome nota de lo grave que es la situación y las medidas necesarias para corregir. En este momento tan crítico, el Gobierno Nacional debe focalizarse y generar propuestas para solucionar la crisis económica que estamos sufriendo todos los argentinos y dejar los ataques a las instituciones, como la Corte y el Poder Judicial. El esfuerzo debe estar puesto frente a la difícil inflación que se hace, realmente, insoportable.

*Germán Garavano es ex ministro de Justicia de la Nación.