El ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto Felipe Solá recibió hoy al nuevo nuncio apostólico en Argentina, monseñor Miroslaw Adamczyk, quien le entregó una copia de sus cartas credenciales.

El obispo polaco había sido designado para el cargo por el Papa Francisco el 22 de febrero pero su arribo al país se demoró hasta el 6 de septiembre por la pandemia de coronavirus.

"Durante el encuentro analizaron el contexto mundial, la crisis provocada por el Covid-19 y recordaron especialmente la atenta mirada que el Papa Francisco tiene sobre nuestro país", destacó un comunicado de Cancillería.

"Ser el representante del Papa en su país natal es un privilegio y, al mismo tiempo, una responsabilidad. El Santo Padre conoce Argentina y sus problemas, me habló del país y de la Iglesia con mucho amor. Él sigue desde Roma la vida de sus compatriotas y lo hace con mucho cariño y atención. Reza continuamente por Argentina", manifestó Adamcyk.

Por su parte, el jefe de la diplomacia argentina ponderó "la incansable prédica de Francisco por la protección de los más vulnerables, la solidaridad y el cuidado de la casa común".

En la audiencia, Solá estuvo acompañado por el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, y el jefe de Gabinete de la Cancillería, Guillermo Justo Chaves, en tanto que Adamcyk estuvo escoltado por el encargado de negocios de la Nunciatura Apostólica, monseñor Aliaksandr Rahinia.