Poco después de que el presidente de ese país, Donald Trump, anunció el despliegue de todas las fuerzas de seguridad para "dominar las calles" y amenazó con despachar al ejército si los gobernadores eran incapaces de parar la violencia, un gran grupo de manifestantes produjo saqueos en la Quinta Avenida de Nueva York, donde se ubican las tiendas de las mejores marcas del mundo.

Los disturbios abarcaron todo el enorme país del norte, reportaba esta mañana Adrián Sack, el corresponsal de América TV, desde Atlanta.

Autoridades locales y estatales desplegaron a miles de soldados de la Guardia Nacional (algo así como la Gendarmería argentina), impusieron estrictos toques de queda y cerraron el transporte público para frenar los movimientos de la gente, aunque esas medidas hicieron poco por impedir que muchas ciudades volvieran a sumirse en el caos.

Los manifestantes en Filadelfia lanzaron piedras y bombas incendiarias a la policía, según versiones oficiales, mientras que se registraron saqueos en más de 20 ciudades, especialmente del estado de California.

El conductor de un camión, aparentemente de forma deliberada, arremetió contra manifestantes en Minneapolis, casi una semana después del crimen de George Floyd a manos de la policía, aunque no se registraron heridos graves.

También se vivieron momentos de máxima tensión en inmediaciones de la Casa Blanca tras tres días de protestas.

La policía empleó gases lacrimógenos y granadas aturdidoras contra una multitud de más de mil personas, que coreaban lemas al otro lado de la calle, en el Parque Lafayette, en Washington.

La multitud salió corriendo y apiló señales de tráfico y vallas e plástico para prender una gran hoguera en una calle cercana.

Algunos quitaron una bandera estadounidense de un edificio y la lanzaron a las llamas.

Un edificio del parque que aloja una oficina de mantenimientos y baños públicos fue incendiado, y hubo allanamientos en bancos y joyerías.

Toda la Guardia Nacional de Washington fue desplegada para ayudar a controlar las protestas.

En el centro de Los Ángeles, una camioneta de la policía aceleró hacia un grupo de gente en una calle, derribando a dos personas, aunque los manifestantes se levantaron y corrieron hacia la vereda.

En la costera ciudad californiana de Santa Mónica, cerca de una manifestación pacífica, un grupo irrumpió en locales de Gap y Vans, y se vio a gente marcharse con cajas de zapatillas.

También hubo protestas y graves incidentes en Salt Lake City, Atlanta, Boston, Phoenix y decenas de ciudades más.