Rusia desestimó este lunes las críticas de Japón a los ejercicios navales de su Flota del Pacífico y precisó que necesitaba estar en guardia contra una variedad de amenazas regionales mientras se enfocaba en Ucrania.

El secretario en jefe del gabinete japonés, Hirokazu Matsuno, informó este lunes que Tokio había presentado una protesta ante Moscú por sus ejercicios militares alrededor de las islas en disputa cerca de la principal isla del norte de Japón, Hokkaido.

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, respondió que los simulacros se estaban llevando a cabo "en estricta conformidad con el derecho internacional".

"Nuestro entorno es muy turbulento en muchos frentes. Está plagado de situaciones de conflicto, conflictos regionales. Todos somos muy conscientes de la geografía de estos conflictos regionales", declaró Peskov a los periodistas.

Japón tiene una disputa territorial con Moscú sobre islas en el Pacífico norte que se remonta al final de la Segunda Guerra Mundial. Como miembro del Grupo de las Siete democracias ricas, Tokio se sumó a las sanciones occidentales contra Rusia.

Rusia está ansiosa por demostrar que aún puede proyectar fuerza en el Pacífico a pesar de que su ejército está siendo estirado y agotado por la guerra en Ucrania, ahora en su mes 14. La inspección sorpresa de su Flota del Pacífico, incluidos lanzamientos de misiles y pruebas de torpedos, se anunció el viernes pasado.

La televisión estatal mostró el lunes imágenes del presidente Vladimir Putin recibiendo un informe sobre los ejercicios del ministro de Defensa, Sergei Shoigu.

Shoigu dijo que habían incluido "ataques de imitación contra grupos navales enemigos", mientras que Putin respondió que los controles instantáneos habían demostrado que la Flota del Pacífico estaba en un alto nivel de preparación y que la prioridad de Rusia era Ucrania.

El mes pasado, dos aviones bombarderos estratégicos rusos, capaces de transportar armas nucleares, sobrevolaron el Mar de Japón durante más de siete horas cuando el primer ministro de Japón iniciaba una visita a Ucrania.

Los últimos ejercicios navales de Rusia coincidieron con una visita a Moscú del ministro de Defensa chino, Li Shangfu, quien se reunió con Putin este domingo.

China y Rusia declararon el año pasado una asociación "sin límites" y forjaron lazos comerciales, políticos y militares más estrechos desde el comienzo de la guerra en Ucrania, que culminó con una visita del presidente chino, Xi Jinping, a Moscú el mes pasado.