La Cancillería de Rusia convocó este martes a la embajadora de los Estados Unidos en Moscú, Lynne Tracy, en relación con "la creciente implicación" de Washington en el conflicto en Ucrania al lado de Kiev y le hizo entrega de un documento en el que incluso se desliza una advertencia a los ciudadanos norteamericanos que están ahora en la nación invadida.

Desde el organismo precisaron que en la nota de protesta entregada a Tracy se hace énfasis en la "falsedad" de las declaraciones de la Casa Blanca de que Estados Unidos no es parte del conflicto, cuando continúa mandando armas a Kiev y proporcionándole al Ejército ucraniano datos para atacar instalaciones militares y civiles rusas. 

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En este sentido, el Ministerio de Exteriores reiteró que los sistemas de armas y el personal de mantenimiento, entre ellos ciudadanos estadounidenses, "representan objetivos legítimos".

"Al respecto, a la embajadora se le notificó que el actual curso agresivo de Estados Unidos, que profundiza la confrontación con Rusia en todas las direcciones, es contraproducente. En particular, señalaron que para una desescalada Washington tiene que emprender pasos que prevean la retirada de sus militares y de la OTAN, (así como) de su tecnología militar, (incluyendo) el cese de la actividad antirrusa", reza el comunicado oficial.

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Nord Stream

Por otra parte, la Cancillería acentuó que Washington debe dar explicaciones respecto a las explosiones en los gasoductos Nord Stream y no impedir "una investigación objetiva para establecer a los culpables".

Al respecto, el sitio Actualidad RT, informó que el Consejo de Seguridad de la ONU tiene planeado reunirse a petición de Moscú para abordar las recientes investigaciones que señalan a Washington como el presunto responsable de los actos de sabotaje contra los gaseoductos Nord Stream ocurridos el 26 de septiembre.

Añade que la reunión se celebrará luego del revuelo mediático que causó el artículo del aclamado periodista Seymour Hersh, en el que afirma que buzos de la Marina estadounidense colocaron los explosivos bajo los gasoductos en junio de 2022.