La policía haitiana informó que al menos 10 presuntos pandilleros habían sido linchados y sus cuerpos quemados por residentes de Puerto Príncipe, la capital del país.

El portavoz de la policía haitiana, Gary Desrosiers, revesló que el grupo de bandidos armados viajaba en un vehículo en la capital y que la Policía tenía la intención de arrestarlos. Por separado, agregó que el notorio jefe criminal Carlo Petithomme estaba muerto, sin ofrecer detalles.

Petithomme pasó por el alias Ti Makak y lideró una pandilla del mismo nombre. Los linchamientos siguieron a días de enfrentamientos entre pandilleros y agentes de seguridad.

Fotos de la agencia de noticias Reuters y videos que circulan en las redes sociales muestran varios cuerpos apilados en la carretera, con neumáticos humeantes y otros objetos encima. La gente los rodeó, gritando furiosamente y hasta se pudo ver a una persona golpeando los cuerpos sin vida con un objeto contundente.

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Las pandillas en Haití se fortalecieron desde el asesinato del presidente Jovenel Moise en 2021, con residentes atrapados en el medio, ya que gran parte de la capital y el campo se tornaron anárquicos.

La situación de seguridad se deterioró aún más en los últimos meses, con tiroteos rutinarios entre los policías y las pandillas. Las sangrientas batallas territoriales dejaron cientos de muertos y miles de desplazados.

Desrosiers apuntó que el enfado de la población era comprensible "pero la colaboración que buscamos debe hacerse sin violencia". Los grupos criminales controlan alrededor del 80% del área metropolitana de Port-au-Prince, donde unas 200 bandas operan con impunidad, según estimaciones.

El gobierno de Haití y altos funcionarios de las Naciones Unidas solicitaron que una fuerza internacional apoye a la policía haitiana en su lucha contra las pandillas.

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