Acosada por controversias sobre la manipulación del precio de las acciones y un costoso bolso de regalo, la primera dama de Corea del Sur, Kim Keon Hee, no fue sido vista en público desde el 15 de diciembre, pero pocos en Seúl se sorprendieron en la medida en que se acercan unas elecciones parlamentarias de alto riesgo. 

El presidente Yoon Suk Yeol no se presentará a las elecciones del 10 de abril, en las que su Partido del Poder Popular enfrenta una ardua batalla para recuperar el control del parlamento.

También tiene prohibido hacer campaña, ya que ya ocupa un cargo público, recordó la agencia de noticias Reuters.

Aun así, los analistas consideran la ausencia sin precedentes de la vista pública de su esposa, Kim Keon Hee, después de que la pareja regresó de una visita a los Países Bajos el 15 de diciembre como una decisión política para proteger al partido de cualquier comentario negativo.

"Dado que la primera dama no está mostrando imágenes positivas al público, permanecer callada durante este tiempo podría ayudar (al partido de Yoon en) las elecciones", estimó Shin Yul, profesor de ciencias políticas en la Universidad Myongji de Seúl.

Consideró también que "si reapareciera, podría ser problemático, no sólo por los escándalos en sí, sino también por su imagen desfavorable ante el público".

Antes de la elección de Yoon en 2022, las acusaciones de participación de Kim en la manipulación de las cotizaciones bursátiles habían llevado al Parlamento, controlado por el Partido Demócrata, a aprobar un proyecto de ley para una investigación por parte de un fiscal especial. Pero Yoon lo vetó.

Su esposa volvió a verse envuelta en una polémica en enero, cuando imágenes grabadas por una cámara oculta la mostraban aceptando un bolso Dior como regalo, una acción que amenazaba con sembrar el desorden en el PPP de Yoon.

“Después de que terminó un problema, surgió otro”, opinó Kang Hyun-sook, un residente de la capital de 65 años

Kim, que fue defensora de los derechos de los animales, había elevado su perfil trabajando para detener el consumo de carne de perro y ayudó a impulsar la prohibición de la práctica en Corea del Sur.

Aún así, Kim fue un lastre para la popularidad de Yoon, que cayó al 36,3% en una encuesta de 2.509 personas publicada el lunes por la encuestadora Realmeter, desde un máximo reciente del 41,9%.

Extracto y adaptación de un artículo de Sebin Choi & Hyun Yong Yi, para la agencia de noticias Reuters