A pesar de que en el Ártico viven pocas personas, algunos mares de esa región están fuertemente contaminados con plástico debido a una corriente del Océano Atlántico que arrastra los residuos hasta allí, sostuvieron investigadores.

En 2013, los científicos a bordo de la goleta francesa Tara, entre los que estaba el español Andrés Cózar, de la Universidad de Cádiz, se sorprendieron al ver que los mares al este de Groenlandia y al norte de Escandinavia son un callejón sin salida para los plásticos, dijo el informe publicado en la revista Science Advances.

Los hallazgos "subrayan la importancia de manejar adecuadamente la basura plástica en su origen, porque una vez que llega al océano su destino puede ser impredecible", dijo el estudio.

El fenómeno por el que los mares de Groenlandia y Barents se convierten en un basurero es la circulación termohalina, una corriente también conocida como "cinta transportadora oceánica", que lleva restos de plástico a la zona a través de las aguas.

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La ruta del plástico a través del Atlántico Norte también fue rastreada utilizando 17.000 boyas satelitales.

El estudio estima que los desechos allí ascienden a cientos de toneladas, e incluyen sedales y redes de pesca, películas tipo film, fragmentos y partículas.

Una cantidad similar de plástico se puede encontrar en áreas más cercanas al Ecuador.

Los investigadores dijeron que las grandes cantidades de plástico tipo film sugieren que "el material había viajado desde orígenes lejanos, entre ellos las costas del noroeste de Europa, Reino Unido y la costa este de los Estados Unidos".

De acuerdo con el estudio, el plástico que flota en el Ártico representa menos del tres por ciento del total mundial, pero la investigación advierte que continuará acumulándose en los próximos años.

Miami, AFP-NA.NOTA COMPLETA SOLO PARA ABONADOS.