El flamante presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, prestó juramento entre cánticos de "Muerte a los Estados Unidos" y "Muerte a Israel".  Irán, que apoya a los grupos que se describen a sí mismos como el "Eje de la Resistencia" ante Israel y la influencia de los Estados Unidos en Medio Oriente, acusó a la nación norteamericana de apoyar lo que llama crímenes israelíes en Gaza.

"Quienes suministran armas que matan a niños no pueden enseñar humanidad a los musulmanes", afirmó Pezeshkian el día de su asunción , según un informe de la agencia de noticias Reuters. A la ceremonia asistieron líderes de Hamás y la Jihad Islámica, aliados palestinos de Irán, así como altos representantes del movimiento Houthi, respaldado por Teherán en Yemen, y del Hezbolá en Líbano.

Pezeshkian llegaba al poder en Teherán con la promesa de mejorar las relaciones con el mundo y aliviar las restricciones a las libertades sociales en el país. "Buscaremos una interacción constructiva y efectiva con el mundo basada en la dignidad, la sabiduría y la conveniencia", aseguró Pezeshkian, un moderado relativo, en una sesión del parlamento a la que asistieron dignatarios extranjeros y que fue transmitida en vivo por la televisión estatal.

Su victoria aumentó las esperanzas de un deshielo en las antagónicas relaciones de Irán con Occidente que podría crear oportunidades para desactivar su enfrentamiento nuclear con las potencias mundiales. Pero Pezeshkian asumió el cargo en un momento de crecientes tensiones en Oriente Medio por el conflicto de Israel con Hamás en Gaza y los combates transfronterizos con el aliado de Irán, Hezbolá, en el Líbano.

El nuevo presidente de Irán reemplaza al partidario de la línea dura Ebrahim Raisi, quien murió en un accidente de helicóptero en mayo.