Rusia confirmó el ataque de helicópteros ucranianos a un depósito de petróleo
Los medios rusos no solo confirman esa incursión aérea del país inicialmente atacado sino que suman denuncias sobre posibles ataques químicos y por torturas a soldados prisioneros.
El Ministerio de Defensa de Rusia confirmó este viernes el ataque contra un depósito de petróleo civil lanzado por helicópteros ucranianos al suroeste de su territorio.
Un incendio se desató en un depósito de petróleo en la ciudad rusa de Belgorod, después de que dos helicópteros militares ucranianos lanzaran un ataque contra el mismo, informó inicialmente el gobernador de la región homónima, Vyacheslav Gladkov.
"El incendio en el depósito de petróleo ocurrió como consecuencia del ataque aéreo efectuado por dos helicópteros de las fuerzas armadas ucranianas, que entraron en el espacio aéreo ruso a baja altitud", escribió Gladkov en su cuenta de Telegram.
Todos los servicios de emergencias llegaron al lugar de los hechos y la población civil no corre ningún peligro, añadió el gobernador, quien indicó que dos trabajadores del depósito de petróleo resultaron heridos durante el incendio.
Sin comentarios al respecto desde Kiev, el incidente fue confirmado desde el lugar de los hechos y repercutió rápidamente en los medios rusos así como a través de la agencia Xinhua -a cuyos servicios suscribe NA-, que precisan los movimientos de dos helicópteros a baja altura.
Al menos dos miembros del personal de las instalaciones resultaron heridos en el ataque que afectó a ocho reservorios de combustible, cada uno con un volumen de 2.000 metros cúbicos.
Los residentes de los vecindarios aledaños al depósito fueron y pronto en las redes sociales circularon imágenes de lo que parece ser el momento del ataque, señala el sitio RT.
Más tarde se conocieron las precisiones: dos helicópteros Mi-24 ucranianos entraron en el espacio aéreo de Rusia por el suroeste a una altura extremadamente baja, cerca de las 5 de la mañana de este viernes, y lanzaron misiles contra un depósito de petróleo en las afueras de Bélgorod, comunicó el Ministerio ruso de Defensa.
El portavoz ministerial, Ígor Konashénkov, dijo en rueda de prensa que al ataque dañó algunos tanques, que se incendiaron.
"Me gustaría subrayar que esta instalación servía únicamente para abastecer de combustible a vehículos civiles y que el depósito no tiene nada que ver con las Fuerzas Armadas rusas", indicó.
En respuesta al suceso, las autoridades locales han ordenado cambiar las cadenas logísticas de suministro de combustible a las estaciones de servicio: "La situación es estable. No había escasez de combustible, no la hay y no la habrá", aseguró el gobernador de la región, Vyacheslav Gladkov.
El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), apoyado por países de Occidente, planifica atacar a la población civil con sustancias tóxicas para acusar a Rusia de la agresión y del uso de armas químicas, denunció el portavoz del Ministerio de Defensa, Ígor Konashénkov.
"Sabemos con certeza que, con el apoyo de los países occidentales, la SBU prepara una provocación mediante el uso de sustancias venenosas contra la población civil. El propósito de la hostilidad es acusar a Rusia de usar armas químicas contra la población de Ucrania", dijo Konashénkov.
El también mayor general destacó que "Rusia, a diferencia de los Estados Unidos, cumplió con sus compromisos internacionales al destruir por completo todas las reservas de armas químicas hace mucho tiempo".
"Quiero declarar oficialmente que las unidades de las Fuerzas Armadas rusas involucradas en la operación militar especial no tienen ni pueden tener municiones químicas", subrayó Konashénkov.
El vocero de Defensa explicó que "entre la documentación de combate capturada de la cuarta brigada de la Guardia Nacional ucraniana hay un mapa detallado del territorio de Ucrania con objetivos marcados y los tipos de sustancias venenosas almacenadas".
"Por lo tanto, cualquier intento de provocación de la SBU con el uso de sustancias venenosas inevitablemente será desvelado", recalcó Konashénkov.
Asimismo, el portavoz recordó que los militares rusos en el territorio liberado toman el control de las instalaciones peligrosas para garantizar su seguridad y "detener cualquier provocación de los nacionalistas ucranianos con sustancias venenosas".
Después de la publicación de un video sobre las torturas a los prisioneros rusos en Ucrania, el régimen de Kiev se esfuerza por impedir la revelación de estos hechos, declaró el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia.
"El gabinete de prensa del SVR informa que el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia recibió información confiable de que, tras la publicación de videos sobre las torturas a militares rusos capturados en Ucrania, el régimen nacionalista de Kiev se esfuerza por impedir que se sigan revelando estos hechos", dice el comunicado.
Las autoridades ucranianas persuaden a las autoridades occidentales para que insten al Comité Internacional de la Cruz Roja y a las ONG humanitarias internacionales a abandonar sus intentos de acceder a los prisioneros de guerra rusos.
En particular, los dirigentes ucranianos señalaron a la Cancillería británica que no tenían intención de cumplir la Convención de Ginebra sobre el trato a los prisioneros de guerra y que los soldados rusos capturados no debían recibir alimentos suficientes ni atención médica de urgencia, con el pretexto de que "muchos ucranianos son ahora privados de eso".
El Ministerio de Asuntos Exteriores británico recomendó a los ucranianos que organicen la visita de la Cruz Roja a varios rusos "ejemplarmente detenidos" para permitir que las autoridades ucranianas sean blanqueadas a los ojos de la comunidad mundial, informó el SVR.