Un grupo de expertos de la ONU dijo el jueves que escribió a Moscú expresando su preocupación por el uso de la tortura por parte de las fuerzas militares rusas contra civiles y prisioneros de guerra ucranianos.

Los expertos dijeron en un comunicado que las torturas incluyeron descargas eléctricas, encapuchamientos y simulacros de ejecución y que se habían llevado a cabo para obtener información de inteligencia, forzar confesiones o en respuesta al presunto apoyo a las fuerzas de Ucrania.

Las prácticas habrían resultado en daños a los órganos internos, lesiones de huesos y fracturas, accidentes cerebrovasculares y traumas psicológicos, dijeron.

Un portavoz de la misión diplomática de Rusia en Ginebra no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Moscú ha negado previamente haber torturado o maltratado a prisioneros de guerra y dice que no ataca deliberadamente a los civiles en Ucrania.

Si bien las denuncias de tortura se han presentado previamente contra ambos bandos en el conflicto de 15 meses, el equipo de expertos independientes de la ONU dijo que los métodos de las fuerzas rusas podrían estar "respaldados por el Estado".

La coherencia y los métodos de la supuesta tortura sugirieron "un nivel de coordinación, planificación y organización, así como la autorización directa, la política deliberada o la tolerancia oficial de las autoridades superiores", según la relatora especial de la ONU sobre tortura, Alice Jill Edwards, quien envió la carta junto con varios otros expertos independientes.

"Obedecer una orden superior o una directiva política no se puede invocar como justificación para la tortura, y cualquier persona involucrada debe ser investigada y procesada de inmediato por autoridades independientes", dijo.
(Reporte de Emma Farge, Reuters)