El ex primer ministro israelí Benjamin Netanyahu se encaminaba este miércoles a volver al poder, ya que su partido, Likud, de tendencia conservadora, y sus aliados de derecha iban camino a la victoria tras haberse escrutado el 90 por ciento de las mesas.

De esta manera, la coalición que encabeza Netanyahu estaba a punto de lograr los votos necesarios para tener la mayoría en el parlamento.

"Estamos a punto de conseguir una gran victoria", dijo un sonriente Netanyahu a sus seguidores, en la sede electoral de su partido, el Likud.

La alianza de Netanyahu con el candidato de extrema derecha Itamar Ben-Gvir, cuyo bloque de sionismo religioso va camino de convertirse en el tercer partido más grande, tiene en alerta a los palestinos y causa preocupación de algunos aliados, como Estados Unidos.

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De acuerdo con el recuento parcial, Netanyahu se quedaba con 67 de los 120 escaños de la Knesset, como se denomina al parlamento de su país, según informó El Comité Central de Elecciones.

De todas maneras, recién el viernes próximo se conocerían los resultados finales de los comicios, ya que aún restan computarse los votos de aquellos ciudadanos que viven en lugares más alejados.

Netanyahu, de 73 años, ya ocupó el puesto de primer ministro durante quince años, doce de ellos en forma consecutiva, y actualmente es juzgado por cargos de corrupción, que negó sistemáticamente.