Elecciones en Estados Unidos: cómo llegan los candidatos a días de los comicios
A pocos días de celebrarse una nueva elección presidencial en Estados Unidos, qué revelan las últimas mediciones.
El 5 de noviembre son las elecciones presidenciales en Estados Unidos y la foto no es nada alentadora para los actuales moradores de la Casa Blanca. No lo era ya cuando todavía el actual presidente Joe Biden (82) estaba en carrera por su reelección, pero ahora tampoco lo es con Kamala Harris (60).
Pese a que desde el momento de cambio de candidatos en la fórmula demócrata, la actual vicepresidenta había logrado resucitar la campaña del oficialismo, hoy -a apenas una semana de la elección más importante de la historia de los Estados Unidos- la situación cambió rotundamente y esos más de tres puntos que le había logrado sacar a Donald Trump (78) en el promedio de todas las encuestas -relevado por el sitio especializado RealClearPolitics- hoy ya es un doloroso recuerdo.
En este momento, el postulante republicano no sólo encabeza la las preferencias en los Estados que definirían a su favor el Colegio Electoral sino que, por primera vez desde que Harris comenzó a competir con él, el ex presidente encabeza la intención de votos a nivel general. Hoy Trump alcanzaría el 48,5% de los apoyos de los ciudadanos, mientras que Kamala obtendría el 48,4%, según surge del promedio de los sondeos a nivel nacional. Eso sería prácticamente un virtual empate. Sin embargo, si se mide a nivel de los delegados que otorgan los Estados para el Colegio Electoral, allí el republicano estaría ganando por paliza: 312 representantes contra 226 de la demócrata. Vale recordar que el número mágico que otorga la victoria es de 270 delegados. Si los resultados se dieran así, el próximo martes 5 de noviembre, el magnate se convertiría nuevamente en Presidente de la Nación más poderosa del Mundo, con todo lo que eso significa.
A ese resultado se llega después de proyectar en los Estados que aún aparecen sin definir y las tendencias que marcan las encuestas. Por ejemplo: en Nevada, Trump aventaja a Harris por 0,7%; en Arizona, por 1,5%; en Michigan, por 0,2%; en Wisconsin, por 0,3%; en Carolina del Norte, por 0,8%; en Georgia, por 2,3%; y en Pensilvania, por 0,5%. Es decir, hoy en los 7 Estados son considerados «Péndulos» (que pueden ir para cualquiera de los dos partidos), el magnate republicano lidera las expectativas.
Es cierto que en el caso de Nevada, Michigan, Wisconsin, Carolina del Norte y Pensilvania la diferencia es menor a un punto, lo que podría inclinar la balanza para cualquier lado y esa pequeña brecha se encuentra en el margen de error que detentan los sondeos. Esos 66 delegados que otorga la sumatoria de esos estados (vale recordar que salvo en el caso de Maine y Nebraska, quien gana en un distrito se lleva todos los delegados para el Colegio Electoral), podrían dar vuelta el escenario en sentido contrario si al final se inclinasen por la líder demócrata. Pero en este momento, parecen favorecer -aunque sea por una mínima diferencia- al referente republicano. Y, de esa manera, se aseguraría la vuelta a la Casa Blanca. Es más, las apuestas tienen un claro favorito: Están 66% para Trump y 34% para Harris.
Pero no sólo eso. En el promedio general de votos de los Estados «en batalla» -tal como lo definen en EEUU- Donald Trump aventaja a Kamala Harris por 0,9%: el republicano cosecha el 48,4% de los apoyos, mientras que la demócrata recibe el 47,5%. Y en cuanto a la distribución de bancas en el Congreso, el ex presidente también le gana a la actual Vice: 47,6% a 46,8% en la votación general con vistas a la composición del Capitolio, una diferencia del 0,8%.
La caída en desgracia de Harris viene atada a la cada vez peor imagen del gobierno de Joe Biden, en parte por sus problemas de salud pero mucho más por el tema inflacionario y los altos costos de vida. Hoy la administración demócrata sólo es aprobada por el 40% de la población, algo que perjudica a la vicepresidenta y candidata presidencial.
Como si ese panorama poco alentador para los demócratas fuera poco, The Economist -que también realiza un seguimiento detallado de la evolución de las encuestas- muestra que hoy la «probabilidad de triunfo» de Trump por sobre Harris se ubica en el punto más alto desde que ella asumió la posta de la campaña demócrata: hoy el republicano tendría el 56% de chances de obtener la victoria contra el 44% de su contrincante. Y eso pese a que ese sitio aún tiene a Kamala con una leve ventaja en la intención de voto general: 48,9% contra 47,5% del ex mandatario, es decir, 1,4% de diferencia. Sin embargo, según sus estimaciones, hoy Trump estaría cerca de obtener 278 delegados para el Colegio Electoral, contra 260 que cosecharía Harris.
«El modelo de The Economist sobre las elecciones presidenciales de Estados Unidos estima las posibilidades de cada candidato principal de ganar en cada estado y en el colegio electoral en general. Desarrollado con un equipo de académicos de la Universidad de Columbia, el pronóstico combina encuestas a nivel nacional y estatal con datos fundamentales sobre el estado de la economía, los patrones históricos de votación y la demografía de cada estado para predecir la probabilidad de varios resultados de la contienda», explican desde su web.
Por su parte, en otro sitio especializado en el seguimiento de encuestas como es Fivethirtyeight, también aparece Kamala liderando la intención de voto general por 48,1% contra 46,6% de Trump, es decir, con una diferencia a su favor de 1,5%. Aunque, como en el resto de las webs que hacen ese trabajo, la tendencia muestra un avance del republicano y un retroceso de la demócrata. Y bastante lejos de aquellos 3,5 puntos que la vice le llegó a sacar al magnate en su mejor momento.
En cuanto a los «Estados Péndulos» en este sitio Trump aparece arriba en 1,9% en Arizona, 1,6% en Georgia, 0,2% en Nevada, 1,3% en Carolina del Norte, 0,3% en la estratégica Pensilvania. En Wisconsin están empatados. Y Harris sólo lidera en Michigan, con una diferencia del 0,5%. En ese escenario -y aun si Wisconsin se inclinara por los demócratas- el republicano se llevaría un contundente triunfo en el Colegio Electoral.
Lo paradójico es que esa potencial victoria del ex presidente se podría llegar a dar, pese a que su imagen negativa en el público en general sigue superando a la positiva: 52,1% contra 43,5%. Mientras que en el caso de la actual vicepresidenta la imagen desfavorable es de 47,7% contra 46,3% de la favorable. Es decir, el saldo negativo de Trump es de 8,6% y el de Harris es 1,4%.
Así, con esa presunta paridad llegan las elecciones que para muchos son las más importantes para la historia de los Estados Unidos. Pero que en los últimos días parecen darle una luz de ventaja al ex presidente republicano (2016-2020), pese a los múltiples problemas judiciales que atraviesa -con una condena y todo- y a la imagen que dejó la violenta toma del Capitolio, aquel 6 de enero de 2021, cuando fanáticos suyos protagonizaron uno de los hechos más violentos del devenir de la principal potencia global, y que amenazó a su propia democracia. Aun así, el magnate de bienes raíces hoy tiene unas altas chances de triunfar en los comicios y derrotar a una Kamala Harris sobre quien pesa el lastre de la mala imagen del gobierno de Joe Biden, de la que ella es vicepresidenta.
Todavía el final aparece abierto. Pero…. los ojos del planeta están depositados sobre estas decisivas elecciones que están en su recta final y que definirán el destino de los EEUU… Y de todo el mundo.
Newsweek