El Presidente de México pide perdón al pueblo maya por cinco siglos de abusos
El Estado mexicano ofreció disculpas al pueblo originario de la península de Yucatán, por los abusos cometidos desde los casi 300 años de colonia española y 200 años del México independiente.
"Aquí, por un imperativo de ética de Gobierno, pero también por convicción propia, ofrecemos las más sinceras disculpas al pueblo maya por los terribles abusos que cometieron particulares y autoridades, nacionales y extranjeras, en la Conquista, durante los tres siglos de dominación colonial y dos siglos del México independiente", dijo el mandatario en un discurso pronunciado en el llamado Santuario de la Cruz Parlante, en el estado de Quintana Roo, enclavado en la franja costera oriental de la península de Yucatán.
El mandatario eligió esta fecha para un evento titulado Fin de la guerra de castas y la Ceremonia del perdón a los pueblos originarios, que sobrevivieron a aquella "guerra de exterminio" comandada por militares mexicanos.
En el mes de julio de 1847, los mayas se levantaron contra la población blanca (criollos españoles y mestizos), que causó unas 250.000 vidas humanas, y terminó en 1901 con la ocupación militar de la capital maya moderna, donde está el santuario llamado también Chan Santa Cruz.
Al acto asistieron autoridades tradicionales de los pueblos mayas, gobernadores de cinco del territorio sureste mexicano: Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, que se extienden en las selvas de la península yucateca, rodeada por el mar Caribe y el Golfo de México.
Las comunidades de casi dos millones de habitantes que preservan la lengua maya, muchas de ellas sin hablar español, son herederas de los constructores de las espléndidas pirámides prehispánicas de Chichen Itza, Tulum, Cobá y Calakmul, en México, y de Tikal en Guatemala, en el llamado periodo clásico de esa cultura, que misteriosamente fueron abandonadas en el siglo VIII antes de la llegada de los europeos en el siglo XV, y devoradas por la selva hasta sus descubrimientos varios siglos después.