El canciller de Brasil, Mauro Vieira, expresó el malestar de su Gobierno al embajador de Israel, Daniel Zonshine, luego de que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva fuera declarado "persona no grata" por el estado hebreo.

El motivo alegado por Israel fue que el mandatario brasileño comparó el accionar en la Franja de Gaza con el Holocausto.

Según fuentes diplomáticas brasileñas citadas por las cadenas de noticias GloboNews y CNN Brasil, Vieira mantuvo una reunión "directa y abierta" con el embajador israelí para expresarle el repudio brasileño a la decisión del Gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu.

El encuentro se realizó en la sede de la Cancillería brasileña ubicada en la ciudad de Río de Janeiro, informó la agencia de noticias Xinhua.

En un comunicado, la Cancillería brasileña informó este lunes: "En vista de la gravedad de las declaraciones del Gobierno israelí de esta mañana, el ministro Mauro Vieira, que se encuentra en Río de Janeiro para la reunión del G20, convocó al embajador israelí Daniel Zonshine para que se presente hoy en el Palacio de Itamaraty, en Río. Y llamó a consultas con el embajador de Brasil en Tel Aviv, Frederico Meyer, que mañana parte para Brasil".

La reacción de Netanyahu se produjo luego de que Lula calificara de genocidio los ataques israelíes contra los civiles de Gaza, durante su participación el domingo en la cumbre de la Unión Africana en Etiopía.

En este contexto, el excanciller Celso Amorim, asesor especial del presidente Lula en asuntos internacionales, descartó pedir disculpas a Netanyahu por los dichos de Lula.

"Existe cero chance de que Lula pida disculpas. Él no hizo nada equivocado, apenas citó hechos históricos. Ningún pueblo tiene el monopolio del sufrimiento", aseguró Amorim al diario O Estado de Sao Paulo.