Dos personas murieron en la ciudad de Mandalay, en el centro de Myanmar, en el marco de una nueva marcha en el país asiático en rechazo al golpe militar contra la líder Aung San Suu Kyi y a favor de un gobierno civil.

Los dos fallecidos participaban de las manifestaciones, mientras que Singapur y las Naciones Unidas condenaron la actuación de la Policía, ya que las sospechas apuntan a la utilización de munición real contra la gente que participa en lar marchas.

Los dos fallecidos se sumaron a Thwate Thwate Khaing, una joven que fue asesinada de un tiro en la cabeza cuando participaba de las protestas días atrás.

El primero de febrero último, un grupo de militares desplaó a la consejera de estado Thwate Thwate Khaing,y el país se sumió en la inestabilidad y la violencia.

Según el sitio France 24, Mandalay no es la única urbe en la que se registraron protestas.

Otras multitudes –con trabajadores del transporte, artistas y minorías étnicas– llenaron otras calles y pueblos de Myitkyina, Bagan y Pathein.