Corea del Norte se vio sorprendida por un brote de Covid-19 sin vacunas y con apenas un puñado de respiradores artificiales, por lo que se halla virtualmente inerme de frente a la terrible enfermedad.

Así lo describió un informe publicado este lunes por un medio europeo, a cargo de un especialista en temas internacionales.

El pequeño país asiático deja para un eventual “plan B” las vacunas y la asistencia que le han ofrecido tanto China como la OMS, los Estados Undios y su vecina Corea del Sur, de acuerdo con esa fuente informativa.

El Gobierno norcoreano teme dejar entrar a personal extranjero y que eso pueda desestabilizar al régimen, es la explicación que ofreció esa especie.

Así, mantuvo bloqueada la llegada de los suministros que necesitaría para llevar una campaña eficaz.

Según la OMS nadie se vacunó en Corea del Norte desde que se descubrió el antídoto y se empezó a aplicar en todo el mundo.

En cuanto a los respiradores, el periodista especializado Oscar Valero, contabilizó en su informe para Euronews que hay solamente "unas docenas" en Corea del Norte.

Citó entonces que como es lógico, esa cantidad resulta insuficiente para 24 millones de habitantes y para colmo, quedaría reservada a la élite norcoreana.

Y añadió que el otro problema es acceder a los enfermos, "porque las malas comunicaciones con las zonas fuera de la capital hacen inaccesible la ayuda hospitalaria para muchos". 

Menos personas con fiebre 

El número de pacientes con cuadro de fiebre en la República Popular Democrática de Corea (RPDC) superó los 2.940.000 personas, de los cuales 2.540.000 se recuperaron, desde finales de abril, informó este martes la agencia oficial de noticias del país KCNA.

En el periodo de 24 horas hasta las 18:00 hora local (09:00 GMT) del lunes, el país sumó más de 134.000 personas con fiebre, aproximadamente 33.000 menos que el día anterior, además de más de 213.000 pacientes recuperados y cero muertos, detalló la KCNA, citando información de la oficina estatal de prevención epidémica de emergencia.

Pocos días después de que se activara el sistema de máxima emergencia para la prevención de epidemias, "las tasas de morbilidad y mortalidad a nivel nacional disminuyeron disminuido drásticamente y ha aumentado el número de personas recuperadas", añadió la agencia noticiosa.

En comparación con el pico de unas 393.000 personas con fiebre registrado el 15 de mayo, los casos del lunes se redujeron a alrededor de un tercio. El número de muertos en el período citado inicialmente fue de 68 mil.

El 12 de mayo, la KCNA reportó que se detectó la presencia de la subvariante BA.2 de ómicron de la COVID-19 de las muestras recolectadas, el 8 del mismo mes, de un grupo de pacientes en Pyongyang, la capital del país.