Los medios militares y estatales chinos acusaron a Estados Unidos de amenazar la seguridad global, días después de un informe de la agencia de noticias Reuters que encontró que la empresa SpaceX de Elon Musk estaba construyendo cientos de satélites espías para una agencia de inteligencia de la nación norteamericana.

La unidad Starshield de SpaceX está desarrollando la red de satélites en virtud de un contrato clasificado de 1.800 millones de dólares con la Oficina Nacional de Reconocimiento (NRO), según informó Reuters el viernes, citando cinco fuentes familiarizadas con el programa.

SpaceX está construyendo una red de satélites espía para agencia de inteligencia

Una cuenta de redes sociales administrada por el Ejército Popular de Liberación (EPL) opuso que el programa SpaceX expuso la "desvergüenza y el doble rasero" de los Estados Unidos, mientras que Washington acusa a las empresas tecnológicas chinas de amenazar la seguridad estadounidense.

"Instamos a las empresas estadounidenses a no ayudar a un villano a hacer el mal", publicó Junzhengping, una cuenta administrada por el EPL, en la plataforma de redes sociales Weibo, con 1,1 millones de seguidores.

"Todos los países del mundo deberían estar atentos y protegerse contra amenazas de seguridad nuevas e incluso mayores creadas por el gobierno de los Estados Unidos", decía la publicación.    

Los investigadores chinos del EPL han estudiado durante los últimos dos años el despliegue de Starlink en la guerra en Ucrania y advirtieron repetidamente sobre los riesgos que representa para China.

Pekín planteó que comenzará a construir sus propias constelaciones de satélites.

Por otra parte, China criticó este lunes a Corea del Sur por la participación de Taiwán en una cumbre para la democracia respaldada por los Estados Unidos en Seúl, donde la ministra de Asuntos Digitales de la isla, Audrey Tang, entregó un mensaje por video que no había sido anunciado.

Tang planteó en la tercera Cumbre para la Democracia que Taiwán sufría de forma desproporcionada ciberataques concertados y que la isla estaba dispuesta y era capaz de trabajar con todas las partes interesadas para garantizar que la IA se desarrolle de forma segura y sostenible.

Taiwán es un proveedor mundial clave de chips semiconductores, fundamentales para las aplicaciones de esta tecnología.

La conferencia organizada por Corea del Sur es una iniciativa del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, cuyo objetivo es encontrar formas de detener el retroceso democrático y la erosión de los derechos y las libertades.

China, que reclama a Taiwán como territorio propio, aunque la isla rechaza sus reivindicaciones de soberanía, se opuso firmemente a que Corea del Sur hubiera invitado a la isla a participar.

"Sólo hay una China en el mundo. Taiwán es una parte inalienable del territorio chino", declaró Lin Jian, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, en una rueda de prensa celebrada el lunes en Pekín.  

Instó a Seúl a acatar el principio de una sola China y dejar de proporcionar una plataforma a las fuerzas independentistas de para aumentar su prestigio.