Las autoridades de la ciudad de Shanghái tomaron la decisión de separar a los niños con Covid-19 de sus padres, con el objetivo de detener los contagios en la metrópolis de 25 millones de habitantes.

Es por eso que, quienes den positivo (sean asintomáticos o con infecciones leves), deberán aislarse de las personas no contagiadas. Esto aplica para toda la población, ya sean menores; incluso si son bebés, decisión que desató inquietud en las familias.

“Si el niño tiene menos de siete años, recibirá tratamiento en un centro público de salud”, explicó al medio de noticias AFP Wu Qianyu, una responsable de los servicios de salud municipales.

Y agregó que “para los niños mayores o los adolescentes (...), los estamos aislando principalmente en lugares (de cuarentena) centralizados”. Además, comunicó que “si uno de los padres está infectado, podrá acompañar al niño y cuidarlo” en un lugar especial donde todos serán tratados.

Tras esto, en las redes sociales, las familias mostraron su indignación ante esta medida. Al respecto, un usuario comentó en la red social Weibo lo siguiente: “¿Los padres tienen ahora que 'cumplir las condiciones' (estar contagiado) para acompañar a sus hijos? ¡Es absurdo! Es un derecho elemental”. Mientras que otro calificó al servicio sanitario de la ciudad como “inhumano”.

Además, en esa misma plataforma circularon algunos videos no verificados en los cuales muestran a niños pequeños y bebés sin acompañantes en centros de salud públicos. Hecho que hace que se incremente el descontento con las autoridades, las cuales no pueden frenar el número creciente de contagios de coronavirus.

En las últimas semanas, el ministerio de Salud de China anunció más de 9 mil nuevos casos en la ciudad; el 95% de ellos son asintomáticos. Mientras tanto, el municipio continúa con las pruebas de detección en toda la población.