El ex presidente de Brasil, Jair Bolsonaro se presentó hoy ante la Justicia de su país para responder preguntas sobre las joyas que había recibido como obsequio por parte del gobierno de Arabia Saudita cuando todavía estaba en el poder. 

El ex mandatario conservó esas joyas, valuadas en unos 3,5 millones de dólares, en lugar de dejarlas en la sede del gobierno, ubicada en la ciudad de Brasilia, cuando dejó su cargo en diciembre último.

Pocos días después de haber regresado de Estados Unidos, donde pasó los últimos tres meses, Bolsonaro se presentó ante la Policía Federal para dar su declaración, que demandó unas tres horas.

Fabio Wajngarten, ex colaborador de Bolsonaro, señaló a través de sus redes sociales que la audiencia "transcurrió de manera tranquila. Fue una muy buena oportunidad para aclarar los hechos".

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Los abogados de Bolsonaro, en tanto, confiaron que su cliente no cometió ninguna ilegalidad, además, depositaron los dos paquetes de joyas que estaban en poder del ex presidente en un banco público.

A raíz de este episodio, Bolsonarp fue incluido por el Ministerio Público Federal y la Policía Federal en la investigación por peculado, un delito con penas que oscilan entre los dos y doce años de cárcel.

Sin embargo, los problemas judiciales del ex presidente no se agotan con las joyas, ya que está involucrado en una investigación por su supuesta autoría intelectual en el asalto a diferentes sedes gubernamentales en Brasilia, días después de la asunción de Luiz Inacio Lula Da Silva, su sucesor en la presidencia.