Parecía que reinaba la paz en la relación de Jorge Rial y su hija Morena, que los escándalos mediáticos que protagonizaron hace dos años habían quedado atrás y que tras el nacimiento de Francesco, el hijo de la mediática con Facundo Ambrosioni, la familia se había vuelto a unir. Sin embargo, en los últimos días se reavivó el conflicto entre padre e hija.

Todo trascendió luego de que Morena bloqueara en sus redes al conductor de "Intrusos" y a su esposa, la nutricionista Romina Pereiro. Y al ser consultada por un portal de noticias, ésta última aseguró que no tenía ningún problema con la joven. Pero a la mediática no le cayó nada bien que Pereiro accediera a hablar de ella públicamente e hizo un fuerte descargo.

"La verdad es que no iba a responder porque son problemas familiares. Pero la falsedad no es lo mío, así que acá tienen mi descargo. Mi papá cambió mucho desde que empezó a salir con Romina. Dice que su prioridad somos Rocío, Fran y yo, y siempre la pone a ella y a sus hijas antes que a nosotras, que bien o mal siempre lo bancamos en todo. No es lindo recibir rechazo de tu propia familia y mucho menos de gente tenga dos caras, porque para las redes es una y para la vida otra", dijo en diálogo con Ciudad Magazine.

Además, More aseguró que Jorge no le permite trabajar en televisión y que nunca le va a perdonar que la haya internado en un hospital neuropsiquiátrico en 2018, cuando estaban peleados. "Hay cosas que no puedo contar porque son muy de la intimidad familiar, pero esto ya viene desde que mi papá me internó en un neuropsiquiátrico para hacerme pasar por loca por todas las cosas que yo hice. Yo no estoy loca, no estuve loca, no fui una paciente psiquiátrica mal. A un loquito no lo largan después de 12 días de un loquero", disparó y dejó en claro que por más que no se lleva bien con Pereiro no descarta volver a acercarse a su papá.

Y tras su declaraciones explosivas, compartió enigmáticos posteos en su cuenta de Instagram. "Me quedo donde puedo ser yo, donde puedo ser torpe, loca, donde no tenga que fingir sonrisas ni perfección, me quedo donde puedo ser feliz", rezaba la primera imagen que subió a sus historias. Mientras que minutos más tarde publicó: "Por ahí lo que pasa es que no tengo ganas de ser como vos tenés ganas de que sea".

Por el momento, Jorge decidió guardar silencio y no responderle públicamente a su hija mayor. Pero a diferencia de las peleas que tuvieron anteriormente, parece que esta vez el periodista no cuenta con el apoyo de Rocío, su hija menor.