Maru Botana se refirió al presente que atraviesa en Estados Unidos su hija Lucía Solá, de 21 años, y reveló que la joven está trabajando como empleada doméstica en una casa de familia de Hawaii.

La cocinera se definió como una “madre abierta” que apoya la decisión de emigrar de su hija. “Está instalada y muy feliz trabajando de empleada doméstica, mirando la playa... Es una manera de independizarse y gana 40 dólares por hora”, contó Maru en 'Si pasa, pasa', el programa de Nacho Ortelli en Radio Rivadavia.

LEÉ: Belén Ludueña: "No voy a dejar de lado mi profesión por la política"

Además, explicó que la joven se encuentra en un programa de intercambios que dura un poco más de 4 meses y luego regresará a Argentina para continuar con la carrera de Diseño Gráfico en FADU (UBA). “El año pasado se fue con un par de amigas, le gustó la vida de allá y ahora está instalada. Nosotros fuimos varios años a Hawaii y es un lugar que me gusta muchísimo. Nos re cautivó el lugar”, dijo Maru.

Maru contó que no es la primera vez que pasa tiempo alejada de sus hijos. “Agustín, por ejemplo, estaba también de intercambio en Bélgica durante la pandemia. Y le dije 'no vuelvas, viví esta situación'. Son experiencias y hay que vivir la vida. Los viví tanto de chicos que también me divierte que crezcan y vivan experiencias. Me divierte que mis hijos me ayuden y poder transitar mi vida con ellos. No me asusta que crezcan”, señaló y agregó: “Siempre en mi vida deseé educar hijos fuertes, independientes y felices. Es lo que quiero”.

LEÉ: En el día de su 38° aniversario, la Rock and Pop lanza la programación 2023

Con todo lo que viví, yo ya no le tengo miedo a nada. Para mí, las situaciones hay que vivirlas. Yo todo lo que tengo me lo gané y me costó. Y soy muy de vivir lo que me tocó. Cuando me pasó vivir esto con Agus, muchas mamás me decían: ‘¡Estás loca! ¿Cómo le vas a decir que se quede?’. Pero dije: ‘Él lo puede vivir. Y, si vuelve a casa, va a volver frustrado. Todo terminó bárbaro, hoy trabaja para Barcelona y ya tiene experiencia. Cuando hablo con él, es como si fuera un par. A veces me da vuelta la cabeza porque me marca algo que estoy haciendo mal y tiene razón. Y es re lindo cuando te empieza a pasar eso”, continuó Maru.

La pastelera también habló sobre la posibilidad de que alguno de sus hijos elija erradicarse en el exterior del país. “No me gustaría porque amo a mi país, pero hoy en día los chicos hacen ese intercambio”, sostuvo. Maru Botana y su marido, Bernardo Solá, fueron padres de ocho hijos: Agustín, Lucía, Matías, Sofía, Santiago, Facundo (quien falleció en 2008), Juan Igancio y María Inés.