La propuesta cultural de Candlelight se trata de conciertos íntimos a la luz de las velas con tributos a compositores clásicos y contemporáneos, desde Vivaldi y Chopin hasta bandas modernas como Queen y Coldplay. Sin embargo, aunque el concepto busca democratizar el acceso a la cultura, los precios de las entradas en Buenos Aires han generado controversia. Mientras en varias ciudades europeas el costo promedio de un ticket ronda los 2 euros, en Argentina los precios pueden superar los 50 euros. Entonces, ¿qué explica esta notable diferencia?

El contraste de precios es impactante: una función en Madrid o París cuesta menos de 2 euros, mientras que en Buenos Aires las entradas más accesibles rondan -aproximadamente- 50 euros. Esta diferencia no solo resulta sorprendente, sino que también refleja las complejidades económicas que enfrenta el público argentino para acceder a propuestas culturales internacionales.

Los organizadores de eventos como Candlelight ajustaron sus precios y de esta manera, mientras en Europa los precios se mantienen estables, en Argentina se ven directamente impactados por la inestabilidad económica.

Candlelight ha logrado captar el bolsillo del público argentino con funciones en el Auditorio del Colegio San José y en el Centro Asturiano, el evento ha demostrado que, incluso en un contexto económico difícil, los argentinos pagaron por la experiencia cara.

¿Cómo se justifica la diferencia?

La justificación para cobrar entradas más al evento apunta a que deben acomodar precios, según el país. La serie de conciertos Candlelight no sólo ofrece música en vivo de alto nivel, sino que también se presenta en escenarios cuidadosamente seleccionados y con un ambiente íntimo que no se encuentra en otros eventos musicales.