Luego de su primera semana al aire, el staff de Bake Off sufrió la primera baja de la tercera temporada. A diferencia de las ediciones anteriores, este año el programa que conduce Paula Chaves sale en la pantalla de Telefe de domingo a jueves a las 22:30, motivo por el que cambiaron las reglas del juego. Ya no se trata de una gala semanal, sino que los participantes deben medirse en distintos desafíos y el jurado elige quien abandona la carpa en la gala de eliminación.

Así fue como después de cuatro episodios en los pasteleros amateurs se presentaron ante los televidentes, llegó el día más importante de la semana, el de las definiciones. La prueba consistía en preparar una torta doble altura -con 20 centímetros de altura como mínimo y 16 de diámetro-, con dos rellenos y decoración estilo candy, con muchas golosinas.

Algunos tuvieron con beneficios especiales: Hernán contó con 10 minutos de ventaja sobre el resto por haber sido destacado como el "pastelero del día" en dos oportunidades, mientras que Celeste y Facundo recibieron 5 minutos extra. Pero en líneas generales, la tensión dominó el ambiente, ya que no es fácil preparar una torta como la que había pedido el jurado y mucho menos bajo presión y en poco tiempo.

"Me siento descompuesto, me falta el aire", manifestó Hernán, un arquitecto de 35 años, entre lágrimas en pleno ataque de nervios y amenazó con abandonar la carpa por decisión propia. Mientras que Silvina, quien en los últimos días fue acusada de estar acomodada por ser la esposa del exfutbolista Gabriel Milito, también rompió en llanto por miedo a no cumplir con la prueba en el tiempo pautado. Sin embargo, los dos pudieron salir airosos de la gala.

Luego de degustar todas las preparaciones y analizar puntillosamente cada decoración, el jurado llamó al frente a Emiliano y a Facundo en reconocimiento del buen desempeño que tuvieron a lo largo de las primeras cinco galas. Y finalmente Facundo se llevó el delantal turquesa que lo convirtió en el "pastelero estrella" de la semana y le dará un importante beneficio.

 Mientras que Belén, Gisela y Gabriel les tocó la parte más amarga al ser señalador como los peores de la gala. La primera salvada fue Belén, luego Gisela y así al taxista de 52 años, que se había convertido en uno de los favoritos del público de las redes sociales, le tocó despedirse del certamen. "Me la vi venir y el resultado es justo", manifestó el participante.

"Gaby, te felicito por haber participado de Bake Off. Me encanta que estés acá, que puedas expresar tu creatividad a través de las tortas, y ¿por qué no el primer taxista pastelero?", le dijo Pamela Villar en su despedida. "Qué lindo fue conocerte, yo creo que vas a seguir con esta pasión, vas a hacer tortas para tu familia, para tus amigos, y por qué no la changa de, además de hacer taxi, que empieces a vender tortas a los vecinos", agregó Dolli Irigoyen. Mientras que Damián Betular le vaticinó un gran futuro en el mundo de la pastelería. "Infinitas gracias a los tres, a vos Paula, un placer haber estado acá", cerró Gabriel, satisfecho por su desempeño.