Tobogán social: por la disparada de precios advierten que la clase media va rumbo a la extinción
La disparada de precios y tarifas en los primeros meses del 2024 pone en jaque a miles de familias.
Alcanzar la canasta básica familiar de pobreza o tener ingresos que le cubran la canasta de la clase media es una tarea casi imposible en la Ciudad de Buenos Aires, en medio de la disparada de precios y subas de tarifas en los últimos meses.
Para ser considerada de clase media por ingresos, una familia tipo debió haber tenido en marzo ingresos superiores $1.157.084, sin considerar el alquiler, según la Dirección de Estadística y Censos de CABA.
El panorama se termina de complica si alquilan, ya que en ese caso deberían tener ingresos por encima de los $1.400.000 mensuales.
Por esta razón, la clase media profesional y asalariada va cayendo en la pobreza, según especialistas.
Y los que ya eran pobres se desploman en la indigencia.
Este tobogán social explica el crecimiento de las personas y familias que viven en la pobreza extrema, sin ingresos para adquirir los alimentos básicos.
La Ciudad de Buenos Aires, la de mayores recursos, no es una excepción.
En marzo, la canasta familiar de pobreza fue de $ 766.146 en la Ciudad de Buenos Aires, una suba del 12% en relación con los $ 684.115 de febrero.
Por su parte, por la disparada de los precios de los alimentos, en especial pan, frutas y verduras, la línea de indigencia subió de $290.411 en diciembre a $ 350.564 en enero, a $402.752 en febrero y a $442.239 en marzo: un 310,1% por encima del valor de marzo 2023 ($107.836).
Con estos valores, si a la canasta familiar de pobreza ($ 766.146) se suma un alquiler modesto, una familia tipo (matrimonio y 2 hijos menores) necesitó casi $ 1 millón para no ser pobre.
Las cifras de la Dirección de Estadística y Censos porteña marcan que, en relación con un año atrás, la línea de pobreza se encareció 300,6% (pasó de $ 191.245 a $ 766.146).
En ambos casos representa un alza superior a la inflación promedio interanual que, en CABA, fue del 285,3%. Así, la inflación golpeó más a las familias de menores recursos.
Los $ 766.146 de la línea de pobreza superan la remuneración promedio nacional de los salarios formales que en enero fue de $ 555.269,16 según el RIPTE (Remuneración Imponible Promedio de Trabajadores Estables).
Y muy por encima de los $ 202.800 del salario mínimo, vital y móvil (SMVM) del mes de marzo.
En CABA, alimentos y bebidas no alcohólicas aumentaron 11%.
Los principales incrementos provinieron de la leche, productos lácteos y huevos (18,2%), carnes y derivados (9,4%), verduras, tubérculos y legumbres (22,4%) y pan y cereales (8,8%).