La sostenibilidad fue el eje del cierre del ALTA AGM & Airline Leaders Forum
NA en Nassau: durante tres días se deliberó sobre sostenibilidad, innovación tecnológica, competitividad y conectividad.
Nassau, Bahamas (Enviado especial).- El compromiso de desarrollar una "hoja de ruta regional para América Latina y el Caribe" con el fin de apoyar una transición sostenible en el sector de la aviación, tomando en cuenta las oportunidades y realidades de la región, marcó el cierre del ALTA AGM & Airline Leaders Forum, que se desarrolló entre el lunes y hoy en Nassau, Bahamas.
La Asamblea General de ALTA, que representa a 27 de las principales aerolíneas de América Latina y el Caribe y cerca del 90% del tráfico de pasajeros de la región, acordó financiar el desarrollo de una hoja de ruta regional basada en evidencia con el apoyo de una importante institución académica y la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).
El encuentro, que congregó a más de 400 representantes de la industria aerocomercial, analizó durante tres días temas como sostenibilidad, innovación tecnológica, competitividad y conectividad, resaltando el papel vital de la carga aérea en el fortalecimiento de las economías regionales.
La próxima edición del evento más importante del sector en América Latina y el Caribe regresará a la parte sur del continente en 2025.
Después de Cancún, México, en 2023 y de Nassau, Bahamas, en 2024, el próximo destino de la Asamblea General Anual de ALTA (ALTA AGM) y Airline Leaders Forum será Lima, en Perú. La última vez que tuvo lugar en Sudamérica había sido en 2022, en Buenos Aires.
En el final de este encuentro, ALTA presentó la hoja de ruta regional para América Latina y el Caribe, en el contexto de cómo la aviación latinoamericana puede alcanzar una transición sostenible basada en el potencial de la región, considerando la importancia de la aviación civil en sus economías en desarrollo.
Desde una perspectiva regional, se propusieron detallar los principales caminos, condiciones favorables, opciones de políticas y marcos necesarios para alcanzar un sector de aviación sostenible.
De la misma manera, explorar opciones para la cooperación regional e integración de combustible de aviación sostenible (SAF) y mercados de carbono, lo cual podría reducir el impacto de las medidas de descarbonización en el crecimiento de la aviación en la región.
Acordaron el reconocimiento de la importancia de la colaboración público-privada, y se invitó a la Comisión Latinoamericana de Aviación Civil (CLAC) a apoyar la iniciativa en coordinación con las autoridades de aviación civil de la región.
“El cambio climático es uno de los mayores desafíos que enfrentamos como sector, especialmente en las regiones en desarrollo del mundo, debido a los costos involucrados. América Latina necesita aprovechar las oportunidades disponibles para avanzar hacia una transición sostenible sin comprometer el acceso a los viajes aéreos y la conectividad. La mejor manera de hacerlo es desarrollar el propio camino de la región”, sostuvo al respecto José Ricardo Botelho, Director Ejecutivo y CEO de ALTA.
“Una hoja de ruta basada en evidencia no solo reitera nuestro compromiso como sector de trabajar hacia una transición sostenible, sino que también proporcionará una guía para todos los actores en América Latina y el Caribe con base en sus ventajas y limitaciones. Con el apoyo de los gobiernos, esta iniciativa tiene el potencial de respaldar el crecimiento sostenible de un sector que desempeña un servicio público esencial en la conexión de la región”, señaló a su vez Roberto Alvo, recién electo Presidente del Comité Ejecutivo de ALTA.
Según datos del IPCC (Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático), la aviación contribuyó aproximadamente con el 2% al 3% de la huella de carbono global entre 2013 y 2023.
Dentro de esa huella, los vuelos domésticos en América Latina y el Caribe, junto con las salidas internacionales de la región, representaron el 4,8% de las emisiones de la aviación.
En comparación, la mayoría (83,4%) de las emisiones de la aviación global se originaron en vuelos que operan dentro y desde América del Norte, Europa y la región de Asia-Pacífico.
Se evaluó que se requieren estrategias específicas para la región que aborden la sostenibilidad mientras mantienen el transporte aéreo accesible y competitivo para continuar contribuyendo al crecimiento de las economías en desarrollo de la región.