La Fundación Mediterránea alertó sobre la presión que sufrirá el peso argentino, ante la depreciación que sufrirían las monedas de la región ante el fortalecimiento del dólar a causa de la política económica que implementará el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump.

Asimismo, consideró que  “los bonos argentinos subieron ante la expectativa de que una relación positiva entre Trump y Milei pueda facilitar negociaciones con el FMI y mejorar la llegada de fondos”.

Acerca de la visión global, señaló que  “la victoria impulsa expectativas de políticas pro-crecimiento, con baja de impuestos y mayor gasto público, lo cual motivó subas en Wall Street.

Al respecto de la situación del peso, el documento que firma Maximiliano Gutiérrez subraya que “no se debe pasar por alto que la depreciación generalizada de las monedas comenzará a ponerle mayor presión al mercado cambiario argentino”.

“Esta apreciación del billete estadounidense juega en contra de los precios de los commodities, (cuando el dólar se fortalece, se encarecen en las monedas emergentes, lo que reduce la demanda internacional), amplificado por el temor que las medidas comerciales de Trump desaceleren la economía de China (suba de aranceles al 60% sobre los productos chinos)”, añadió.

El documento indica que el gigante asiático, “además de ser uno de los principales productores de algunos de ellos, también es un gran consumidor. Es así que en los últimos 30 días el barril de petróleo WTI bajó 6,3% y pasó a cotizar cerca de los US$ 72, la soja cayó 3,3% y terminó cotizando en torno a los US$ 369 la tonelada (cuando a inicios de octubre lo hacía en US$ 381), el trigo y el maíz hicieron lo propio al caer, 3,2% y 1,4%, respectivamente”.

“Esto afecta principalmente a los países emergentes cuyas exportaciones dependen de las materias primas, como es el caso de Brasil y Argentina”, recalcó.

Con relación al mercado de bonos, subrayó que subieron a contramano del resto del mundo porque “la city porteña está convencida que la buena relación entre Milei y Trump podría destrabar las negociaciones con el FMI, de manera que permita la llegada de fondos frescos que podrían facilitar la salida del cepo”.

“No obstante, lo cierto es que a la fecha no está nada claro que así sea, incluso no ha habido ninguna señal contundente al respecto desde alguno de los miembros del equipo del nuevo presidente de Estados Unidos”, alertó.