La AFIP investiga una presunta evasión de tabacaleras por 1.000 millones de pesos
Tras controles a empresas del sector se verificaron inconsistencias que hacen presumir evasión tributaria e incorrecta liquidación de los impuestos.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) investiga a empresas del sector tabacalero por posible evasión tributaria e incorrecta liquidación de impuestos. El organismo que conduce Carlos Castagneto presume que las maniobras fraudulentas llevadas adelante por distintos actores de esta cadena habrían redundado en un perjuicio fiscal de 1.000 millones de pesos.
La AFIP pudo verificar la existencia de desvíos en el pago y declaración del impuesto interno a los cigarrillos para un grupo de empresas. Estas inconsistencias podrían estar enmarcadas en maniobras fraudulentas relacionadas a la evasión en la comercialización de productos alcanzados como al incumplimiento de la ley vigente en lo que respecta a la liquidación del gravamen.
En lo que respecta a las tabacaleras, las áreas especializadas de la AFIP detectaron irregularidades en la comercialización del tabaco y productos derivados como así también en la utilización de los instrumentos fiscales que desnaturalizan su existencia como herramientas de asistencia. El monitoreo sobre los eslabones que componen la actividad comprende también la correcta liquidación del impuesto interno a los cigarrillos.
Como había anticipado Carlos Castagneto el jueves 3 vía Twitter, los controles a las grandes empresas se están intensificando. “Dispusimos una serie de medidas adicionales sobre los controles que se realizan a las declaraciones juradas de grandes empresas, y también respecto de su facturación, con el objetivo de evitar artilugios tendientes a bajar la tributación”, había publicado el titular de la Afip en la red social y seguidamente confirmó que “la AFIP detectó que la participación de las grandes empresas en la recaudación global del Impuesto a las Ganancias se encuentra lejos de lo que un país necesita para desarrollarse de manera justa y equilibrada”.
En esa línea también se explayó un día después la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el plenario de la UOM en Pilar al referirse a que “un trabajador que supera el tope de ganancias le aplican la alícuota del 35%, no tiene posibilidad de dibujar el salario como se dibujan los balances de las grandes empresas, que terminan pagando un 5-6% del impuesto”.
De esta manera la AFIP avisó que irá por las grande empresas para lograr tener una base de contribuyentes más amplia y donde los que más tienen aporten lo que corresponde.