La principal expectativa que manifestaron los profesionales en la encuesta laboral Talent Trends 2024 es que los salarios sean aumentados para mantenerse al día con el creciente costo de vida. 

Un 51% expresó directamente su insatisfacción con el salario y el 63% consideró tal disconformidad como el principal motivo para salir a buscar activamente un nuevo puesto.

La compulsa, elaborada por PageGroup entre más de 10 mil participantes en América Latina, dejó claramente expuesta la diferencia entre empleados y empleadores en las percepciones, ya que mientras estos últimos hacen hincapié en iniciativas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DE&I), estrategias de incorporación de IA y políticas de flexibilidad en el trabajo, los asalariados prefieren prioritariamente centrarse en los "hechos conducentes".

“Para enfrentar los desafíos de un mundo laboral constantemente cambiante también a escala local y prosperar en este entorno, es fundamental reconocer la necesidad de acercar a empleados y empleadores, fomentar una cultura de comprensión y adaptabilidad mutua”, sostiene Miguel Carugati, Managing Director Argentina & Uruguay de PageGroup.

Divergencias entre empleados y empleadores

La distintas percepción en el ajuste salarial, puesta de manifiesto en la disconformidad de nada menos que el 79% de los profesionales relevados, con un elevado porcentaje (63%) que transforma esa insatisfacción para salir en la búsqueda de alguna oportunidad laboral alternativa.

Según Carugati, “esta disparidad resalta la dificultad que enfrentan las empresas para cumplir con las expectativas salariales de sus empleados en un contexto económico complejo. Por eso, es crucial ofrecer paquetes salariales competitivos alineados con las expectativas del mercado laboral”.

Las condiciones de trabajo quedan hoy en un segundo plano, subordinadas a la urgente nivelación demandada para las remuneraciones, por ejemplo, el valor asignado al bienestar, por el cual el 87% de los candidatos considera como un factor más importante en su empleo: el equilibrio vida personal-trabajo.

En ese sentido, el 72% de los argentinos prioriza tener un acuerdo de trabajo híbrido o flexible, y en la práctica, solo tres de cada diez empleadores rescatan la relevancia de esa modalidad en el reclutamiento o retención de talento.

Actualmente, más de un tercio de los candidatos está trabajando en la oficina más de lo que lo hacía hace un año atrás y el 52% trabaja en un esquema híbrido.

“Los argentinos están exigiendo autonomía y la capacidad de trabajar de manera flexible, ya no como beneficio opcional, sino como algo que esperan de un trabajo, lo que representa un desafío para los empleadores que desean que las personas vuelvan a la oficina”, concluye Carugati.

Quedarían para después de una coincidencia salarial otras demandas cada vez más desafiantes para los empleadores, como las que impulsan distintas generaciones presentes en el ámbito laboral, como ser la creación de una cultura inclusiva y dinámica donde todas las personas puedan ser auténticas.

Inclusión laboral 

En Argentina actualmente solo el 27% de las personas cree que su espacio de trabajo es inclusivo, la mitad se siente con inseguridad y solo el 15% que enfrenta discriminación de algún tipo lo reporta.

Y finalmente asoman en las decisiones profesionales de las personas las herramientas de inteligencia artificial aún no completamente implementadas en todos los roles.

En el país, el 24% de los colaboradores están utilizándolas en sus puestos de trabajo, mientras que a escala global lo hace el 33%. 

El 40% de los argentinos cree que la IA afectará sus planes de carrera a largo plazo.

“Brindar una visión clara sobre el futuro papel de la IA, y ofrecer oportunidades de crecimiento en un entorno donde estas herramientas mejoren la eficiencia y la productividad, ayudará a retener profesionales y atraer nuevos talentos”, completó Carugati.