El paro de colectivos se adelantó y complica la vuelta a casa
La medida de fuerza había sido anunciada para este viernes, pero arrancó esta misma tarde.
Tras varias semanas de negociación entre el gremio, las empresas y el Gobierno, un sector de los trabajadores de la UTA (Unión Tranviarios Automotor) decidió adelantar el paro nacional de colectivos previsto para esta medianoche y lo inició desde esta tarde, lo que complica el regreso de la gente a las casas.
La medida de fuerza incluirá a todos los colectivos del grupo DOTA, que es el más crítico de la gestión del secretario general del sindicato, Roberto Fernández.
La UTA disidente acusó al gremialista de “negociar sus salarios a la baja” e “imponer una grave migración de trabajadores a otras actividades mejor remuneradas”.
En el escrito difundido desde la organización, señalaron: “Nos cansamos de repetir que un sindicato nacional debe negociar para todo el país y no sólo para la región metropolitana de Buenos Aires donde ya Fernández no sólo no consigue firmar un acuerdo - luego de prometer que si no conseguía un acuerdo salarial se iría del gremio- sino que ni siquiera consigue hacer que se cumplan los aumentos otorgados desde el Estado”.
El paro anticipado lo lanzó la Lista Azul, que confirmó la medida de fuerza con un comunicado en el que apuntan contra Roberto Fernández, secretario de la UTA.
"No nos comemos más los amagues de paro de Fernandez. Que se corra, nosotros nos encargamos", desafió la Agrupación Juan Manuel Palacios.
Afecta a las líneas de la empresa DOTA, en las que esa facción es más fuerte. Esa firma maneja los recorridos del 6, 7, 8, 9, 20, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 44, 50, 51, 56, 57, 74, 76, 79, 84, 91, 99, 100, 101, 106, 107, 108, 115, 117, 130, 135, 146, 150, 161, 164, 168, 177 y 188, en la Ciudad de Buenos Aires.
En Provincia, en tanto, gestiona la 256, 263, 271, 299, 370, 384, 385, 388, 403, 405, 421, 429 y 435.
"Hace ocho años que los trabajadores del transporte venimos soportando que la conducción de la UTA en cabeza de Roberto Fernandez y Jorge Kiener (interventor en el Interior) negocie nuestros salarios a la baja. Han logrado flexibilizarnos de hecho e impusieron una grave migración de trabajadores a otras actividades mejor remuneradas", sigue el texto de la facción disidente.
Sobre Fernández, le objetan que negocia "sólo para la región metropolitana de Buenos Aires" y que "ni siquiera consigue hacer que se cumplan los aumentos otorgados desde el Estado".
En ese sentido, apuntan que "la inmensa mayoría de los trabajadores del interior del país" cobran el 90% de su salario "en negro".
Por su parte, la UTA oficial anunció que aún analiza si llevará a cabo la "retención de tareas" anunciada para este viernes desde la medianoche.
"El Estado nacional abonó esta semana $27.000 millones a las empresas prestatarias del servicio, lo que significa $6.500 millones más que el mes anterior. Se trata de un incremento suficiente para pagar los aumentos salariales de los trabajadores y trabajadoras que deben cobrar su salario el quinto día hábil del mes", indicaron fuentes gremiales.
Si bien algunas empresas comenzaron a girar el dinero a sus empleados, la UTA todavía espera que se cumpla con las subas salariales en todos los casos.
Además, el gremio aseguró que "en este anticipo está contemplada la actualización de los costos no salariales, como el combustible, neumáticos, seguro y mantenimiento del sistema a valores de abril", uno de los puntos de disputa entre Estado y cámaras.
La posible medida de fuerza había sido declarada el miércoles, porque -aseguraban- las empresas no pagaban los aumentos salariales definidos por una resolución del Ministerio de Trabajo.