Las 61 entidades y cámaras que conforman el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) expresaron hoy su "preocupación y rechazo" a toda medida que limite ventas externas, como la reciente suspensión de exportaciones de carne bovina.

 Además, exhortaron al Gobierno "dialogar en favor de la producción, el consumo y las exportaciones agroindustriales".

Fue en una conferencia de prensa encabezada por el vocero del Consejo, José Martins, presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, quien sostuvo que "este tipo de medidas no contribuye a promover más producción, ni a crear empleo, ni a favorecer a los consumidores que tienen afectado su poder adquisitivo".

Martins anunció que el Consejo pedirá una audiencia con el presidente Alberto Fernández para explicar por qué la suspensión de exportaciones de carne vacuna no bajará los precios en el mercado interno.

A lo largo de una rueda de prensa virtual, los miembros del Consejo destacaron que están convencidos de que para "solucionar los problemas de pobreza, inflación y desinversión productiva, se necesitan políticas de mediano y largo plazo que promuevan empleo genuino, el instrumento más efectivo para mejorar sustentablemente las condiciones de vida de los argentinos".

También insistieron en que "un país que no produce, no industrializa, ni exporta, queda atrapado en un círculo vicioso con resultados negativos, mayor pobreza, marginalidad y destrucción de calidad de vida".

"Por eso hemos propuesto desde el año pasado medidas concretas para reactivar la inversión productiva, mejorar la ecuación económica de las economías regionales, lograr un desarrollo federal, inclusivo y sustentable, incluyendo logística, política de género, riesgo agropecuario, biocombustibles entre otras, y ninguna hasta la fecha fue atendida", dijo.

El Consejo se mostró "decepcionado" y sostuvo que "la propuesta de proyecto de ley de inversiones agroindustriales federal, inclusiva y sustentable que podría generar hasta 700 mil puestos de empleos e incrementar en 15.000 millones de dólares las exportaciones anuales, sin requerir subsidios, no tuvo tratamiento".

Lamentó que a pesar de las múltiples reuniones entre los equipos del CAA y funcionarios de los distintos Ministerios del Gabinete Económico, el proyecto esté detenido.

"Reafirmamos nuestra actitud colaborativa, pro-activa para formular propuestas, pero es imprescindible establecer un diálogo productivo y efectivo para trabajar en todos los desafíos y urgencias que requiere nuestro país agroindustrial, con vocación de paz social y miradas alejadas de visiones proselitistas", dijeron los agroindustriales.

La prometida Ley agroexportadora no avanzó y, por el contrario, se retrocedió al cerrar los embarques de carne.

"Si Argentina no produce, no industrializa y entonces no exporta, vienen más pobreza y decadencia", manifestó Martins.

Insistió en que "alentar el camino de restringir exportaciones no mejorará el mercado interno. Los antecedentes de nuestro país avalan esto".

Durante meses, los representantes del CAA recorrieron los despachos de varios gobernadores y se vieron con el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner.

También avanzaron en los trabajos técnicos con los ministros Martín Guzmán, Matías Kulfas y Luis Basterra, además de con la vicejefa de Gabinete Cecilia Todesca.

El objetivo prometido era lograr un proyecto de ley de fomento a las agroexportaciones, sin costo fiscal, y que permitiera incrementar en 15.000 millones de dólares el ingreso de divisas.

Martins admitió que "hasta el año pasado fue muy febril el funcionamiento de las distintas comisiones", e incluso se llegó al punto en que al jefe de Estado anunció el giro de ese proyecto al Congreso en marzo último.

Pero luego -explicaron- "todo se fue diluyendo muy rápido".

El resultado es el "42% de pobreza, 12% de desempleo, 40% de trabajadores en un circuito formal, otro tanto en el informal, mientras que la carga tributaria actual es insoportable".

Cuando le preguntaron a Martins si se sienten defraudados, respondió: "No, somos resilientes. Cuando emprendimos esta voluntad de ponernos a trabajar siempre lo hicimos con el espíritu de trabajar en propuestas de mediano y largo plazo, que vayan trascendiendo a los gobiernos".

Lamentó, además, que algunos funcionarios "trabajan para el hoy y la coyuntura", en un contexto preelectoral.

También destacó la puesta en marcha de mesas sectoriales de la cadena del trigo, maíz y carne, pero aclaró que en este último tema no pudieron revertir la decisión tomada de suspender las exportaciones a pesar de que enviaron representantes a dialogar con la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, y el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.

Daniel Urcía, presidente de Fifra, que agrupa cámaras frigoríficas del interior y que forma parte de la Mesa de las Carnes, contó que luego de aquella reunión con ambos funcionarios no pasó mucho más.

"Estamos esperando una reunión que se va a realizar en el ámbito del Ministerio, donde acordamos el programa de precios.

Pero hoy hablar de soluciones sería apresurado. Estamos buscando alternativas", dijo Urcía.

Mientras que Carlos Iannizzotto, presidente de la entidad cooperativista Coninagro, sostuvo desde Mendoza que "en el Consejo estamos de acuerdo que el país necesita un sector productivo muy fuerte".

En tanto, sobre el tema inflación, Martins dijo que "el fenómeno inflacionario tiene más que ver con una situación macroeconómica, donde se dan un montón de cosas: la devaluación, la maquinita de emitir dinero; los combustibles que aumentan, los salarios que necesitamos que se recuperen. No podemos despegar lo que pasa con alimentos de lo que sucede con otras cosas".