Tras conocerse el proyecto de ley que la provincia de Buenos Aires envió a la legislatura provincial para aumentar el impuesto inmobiliario rural entre un 140% y 300%, el gremio de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) salió al cruce y advirtió que es un “golpe de gracia” a los productores.

“CRA manifiesta su repudio absoluto a las recientes propuestas legislativas que impactarían directamente bajo la línea de flotación de los productores”, remarcaron en un comunicado publicado en su página web.

La queja hace referencia tanto al proyecto de ley "Fondo Federal para el Desarrollo Nacional (Fofeso)", impulsado por Máximo Kirchner, así como la iniciativa del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, de aumentar el impuesto inmobiliario en un 300%.

En este sentido advirtieron que ambos proyectos “constituyen un duro golpe a los productores y a la producción nacional”.

Tendenciosa

Desde CRA, consideraron que el proyecto Fofeso “busca federalizar las retenciones a la soja -con una distribución tendenciosa claramente a favor de la gobernación de Buenos Aires-, es un retroceso inaceptable que perpetúa un impuesto distorsivo y perjudicial para el desarrollo productivo, económico y social del país”.

Por otra parte, remarcaron que “la idea de aumentar el impuesto inmobiliario en un 300% en la provincia de Buenos Aires plantea una carga fiscal insostenible para los productores, comprometiendo su capacidad de producción y generación de empleo”.

“Las propuestas generan un impacto económico negativo que afectará no solo a la agricultura sino también a la economía en su conjunto”, agregaron.

Este 28 de diciembre, la legislatura bonaerense debatirá un proyecto de ley que contempla cambios en el ámbito fiscal de la provincia. Entre las medidas propuestas se encuentran aumentos en la alícuota del impuesto a los Ingresos Brutos, incrementos en la patente automotor y un endeudamiento de la provincia por un total de 1.800 millones de dólares.

En el caso del impuesto inmobiliario, además del aumento, se plantea la eliminación del pago anual, reemplazándolo por cinco pagos mensuales para propiedades urbanas y cuatro para las rurales.

Estas medidas, de ser aprobadas, impactarían en la carga fiscal de los contribuyentes bonaerenses, generando ajustes en diferentes rubros impositivos.