Con el despido de Florencia Misrahi se fue la última funcionaria que ganaba siete veces más que Javier Milei
El Presidente cobra un salario bruto cercano a los 4 millones de pesos y la ex titular de ARCA comenzó su función cobrando más de 32 millones de pesos. "Cuatro palos no le alcanza ni para las expensas en el country", denunciaban en un gremio.
Javier Milei no utiliza la motosierra sólo con los de afuera la empuña con decisión también hacia dentro de su gobierno.
Un asesor del Presidente que no quiere dar su nombre para no caer bajo los dientes de la sierra mecánica afirmó “…el que no se alinea con las directrices generales del triángulo de hierro que decide en el Gobierno termina como en la película de la masacre de Texas. Mirá lo que le pasó a Diana Mondino. Parecía intocable cuando asumió en Cancillería. Votó a favor de Cuba y fue directo al llano”.
Si bien la ex titular de la desaparecida AFIP y, actual,agencia recaudadora nacional, ARCA, Florencia Misrahi nunca estuvo tan encumbrada como la economista y ex Canciller de la Nación, Diana Mondino, la verdad es que ganaba mucho más que los ministros del Gabinete, que la Vicepresidente de la Nación, Victoria Villarruel y que el propio Presidente, Javier Milei.
En el gremio de la UpsAFIP que conduce Julio Estévez (h) y reune a los funcionarios de carrera de ARCA, afirmaron que “…ella dijo que se había bajado el sueldo pero nunca apareció el recibo. La sensación que todos tienen en la agencia es que nunca se lo bajo. No iba a pasar de 30.000 dólares a 4 millones de pesos. No paga ni las expensas en Nordelta. Nosotros no teníamos ninguna duda que la directora ejecutiva jamás iba a reducirse sus haberes a lo que cobra un ministro de Milei. Además, eso sería rebajarla a nuestros sueldos que como directores de carrera tenemos años de experiencia y capacitación para dirigir el organismo fiscal nacional”.
Un sueldo desmesurado por encima de los 30 millones de pesos es una extrañeza estatal que venía desde otras gestiones por tratarse de la recaudadora en jefe y, en definitiva, de la persona que dirige al equipo que debe recaudar impuestos para que el Estado funcione. Sin embargo, la irrupción de un político que detesta al Estado y pretende reducirlo a su mínima expresión tiene sus efectos y Misrahi cometió un error infantil como el voto a favor de Cuba de Mondino.
Crear un impuesto a influencers, streamers y otras actividades típicas de la cuarta revolución industrial que constituye la base de votantes de la Libertad Avanza fue la gota que rebalsó el vaso y Misrahi fue despedida sin contemplaciones.
Todo podría haber sido diferente y la abogada Misrahi se podría haber retirado en silencio de la función pública dentro de unas pocas semanas porque estaba nombrada por un decreto y no por acuerdo del Senado de la Nación. El decreto vencía en los próximos días y con nombrar a otra persona o a nadie, alcanzaba.
Pero a la recaudadora despedida “con justa causa” según dicen en círculos libertarios, no se “le ocurrió mejor idea que intentar una reforma del régimen tributario de streamers e influencers sin preguntarle a nadie. Aunque sea le debería haber preguntado al oráculo tecnológico del gobierno, al Gordo Dan, que pensaba de la idea”, comentó entre risas malvadas un alto funcionario de ARCA.
Resultado, se encendió la motosierra y se convocó al funcionario multifunción Juan Pazo para que sea el nuevo conductor de ARCA. Pazo, con pasado en Cambiemos y en la dirección de la Superintendencia de Seguros de la Nación, es uno de los más cercanos funcioanrios del ministro de economía, Luis “Toto” Caputo, que no quiso dejar la conducción de ARCA y, principalmente, de la DGI, en el misterioso funcionario, del que no se consiguen fotos de su persona en casi ningún lado, Andrés Vázquez.
Toto Caputo perdió una acólita, por Florencia Misrahi, pero envía al “multifunción” Juan Pazo a ARCA. Pazo se estaba probando el traje para asumir en Cancillería junto a Gerardo Werthein para conducir las relaciones internacionales económicas y ahora deberá recaudar para la corona o el Estado que tanto destesta Milei.
Además, tiene sus funcionarios de confianza en el área de Seguros, del sector productivo y del agro. La influencia de Juan Pazo crece día a día.
Juan Pazo va a utilizar el mismo traje para su asunción en ARCA. Como si lo hiciera en Cancillería porque son tiempos para mostrar austeridad, compromiso con la gestión y alineamiento total con los Caputo, Karina y Javier Milei. No quiere errores ni ser eyectado como las damas que cayeron en desgracia.
Asume de apuro y en el gremio de Estévez (h), la Unión del Personal Superior de la AFIP, no saben con lo que se van a encontrar a partir del lunes. “Los trabajadores viven con el corazón en la garganta. Todos los días pasa algún terremoto en un sector donde debería reinar el orden”.
“La gestión de Misrahi fue terrible", explica Estévez. "Luego de tanto miedo que se infundió a la planta de personal del organismo, por primera vez desde su creación en 1996, vamos a tener cerca de 20.000 empleados menos en planta con diez veces más CUIT que controlar. Se retiraron los más experimentados. Excelentes recursos humanos que prefirireron alejarse de la función pública. Le pedimos, encarecidamente, al Presidente Milei y al nuevo funcionario nombrado que, en resguardo del equilibrio fiscal que tiene como objetivo, necesitaremos un urgente refuerzo de personal para encarar el 2025. Sino el equilibrio fiscal será una utopía y Argentina se convertirá en el paraíso de los evasores”.