San Lorenzo tomó la decisión de vender a Iván Leguizamón, una de sus jóvenes figuras para resolver algunos de sus problemas financieros que venían afectando al club. El delantero fue vendido a Olimpia de Paraguay, club dirigido por Martín Palermo, en una operación que incluye no solo el ingreso de dinero, sino que una cancelación de una deuda del “Ciclón” con Facundo Bruera.

La venta de Leguizamón se cerró en dos millones de dólares por el 50% de su pase y de ese monto, 650 mil dólares fueron destinados a saldar una deuda por la incorporación de Bruera, quien había llegado a San Lorenzo meses atrás en un acuerdo que no cumplió las expectativas.

El resto, aproximadamente 1.350.000 dólares, será utilizado para reforzar las arcas del club y afrontar el mercado de pases. Sin embargo, estos ingresos no serán libres de impuestos, lo que limita el margen de maniobra.

Leguizamón de 22 años, había mostrado un rendimiento destacado con la camiseta azulgrana desde su debut en 2022. En 128 partidos, el atacante anotó diez goles y asistió en ocho oportunidades, convirtiéndose en una pieza fundamental para el equipo.

Su partida representa una pérdida significativa para el plantel, pero era necesaria debido a la urgencia económica del club.

La operación de Bruera, que derivó en esta salida, es un claro ejemplo de las decisiones controvertidas que el club tomó en los últimos meses. A pesar de estos problemas, el dinero recaudado con la venta de Leguizamón permitirá a la dirigencia encarar el próximo mercado de pases con mayor tranquilidad y planificar el 2025 bajo la dirección técnica de Miguel Ángel Russo.