El jugador Lucas Francini fue uno de los grandes protagonistas del histórico campeonato de 17 de Agosto, que logró su primer título en la Primera División de Futsal al vencer a Pinocho en dos partidos de una serie final al mejor de tres. El equipo de Villa Pueyrredón marcó un antes y un después en la historia del futsal argentino y en diálogo con Noticias Argentinas, Francini habló de la emoción del título, el trabajo del equipo y su visión del deporte en el país.

Este campeonato significa mucho más que un trofeo. Para mí y para el equipo es el reflejo del esfuerzo, el trabajo colectivo y la superación de muchas adversidades”, aseguró Francini. “Fue un año difícil, donde se presentaron obstáculos en distintos momentos, pero siempre supimos reponernos. En los playoffs jugamos a un nivel altísimo contra equipos como San Lorenzo, Independiente y, finalmente, Pinocho, nuestro clásico rival. Creo que demostramos no solo estar a la altura, sino que merecíamos ser campeones”, destacó el delantero, quien llegó al club en julio.

A pesar de incorporarse a mitad de temporada, Francini se integró rápidamente al grupo y fue clave en los momentos más importantes del torneo: “El equipo venía de un envión positivo cuando llegué, pero trabajamos para seguir mejorando. Los playoffs son un torneo aparte, donde más allá del rendimiento regular, el momento y la confianza son determinantes. Llegamos a esa instancia en nuestro mejor nivel y eso marcó la diferencia”.

Francini también habló sobre el apoyo incondicional de los hinchas, que colmaron las tribunas del Club Alvear en la segunda final: “Fue algo que nunca había vivido. El recibimiento fue increíble, un estadio lleno, con un clima espectacular. Esas cosas quedan grabadas para siempre. El futsal argentino tiene un folclore único, y eso se refleja en la pasión de la gente. Ojalá que siga creciendo porque nuestra liga lo merece”.

Con experiencia en las ligas de España y Brasil, Francini destacó el crecimiento del futsal en Argentina y su posicionamiento como una de las más competitivas del mundo: “Hoy en día estamos entre las mejores ligas del mundo. Si bien en Europa las ligas están más profesionalizadas y tienen mejores infraestructuras, acá no tenemos nada que envidiarles en cuanto a talento, intensidad y nivel de juego. En Brasil y España el futsal tiene más años de desarrollo, pero la pasión con la que se vive en Argentina es incomparable. Es un momento único para el deporte en el país”.

Sobre su aporte en la final, donde marcó dos goles decisivos, Francini se mostró agradecido y humilde: “Obviamente, me encanta hacer goles, pero siempre digo que lo importante es el equipo. Si no hacía goles y salíamos campeones, igual me iba a sentir realizado. Por suerte, pude aportar en los momentos clave para conseguir algo histórico para el club. Este título es de todos”.

Al ser consultado sobre su futuro, el delantero admitió que aún no definió qué hará en 2025: “Por ahora, quiero disfrutar este momento y pasar las fiestas con mi familia. No se sale campeón todos los días, y menos con ellos en la tribuna. Fue algo muy especial para mí”.

Con este logro, 17 de Agosto no solo alzó su primer trofeo, sino que también dejó una huella en el futsal argentino, consolidándose como uno de los equipos más destacados del año. Este campeonato marca el inicio de una nueva era en el deporte, con nuevos protagonistas que están listos para desafiar a los gigantes tradicionales y seguir escribiendo la historia del futsal nacional.