Leyendeker, el jugador de Agropecuario que lesionó a Zeballos: "Estoy angustiado por la noticia"
El defensor fue a pedirle disculpas al vestuario, pero no lo encontró y el Pipa Benedetto le agradeció el gesto.
El futbolista de Agropecuario de Carlos Casares Milton Leyendeker, quien lesionó a Exequiel Zeballos con una brutal patada en el partido frente a Boca por Copa Argentina, aseguró que fue sin intención y le pidió disculpas públicamente.
"Estoy angustiado por la noticias que se dio a conocer", relató el defensor del Sojero en diálogo con TN al enterarse del parte médico del futbolista Xeneize que será intervenido quirúrgicamente esta tarde.
Leyendeker, aún conmocionado por lo sucedido, explicó como fue la fatídica jugada que derivó en la fractura del juvenil: "Lo venía marcando con mi compañero, veo que la tira larga, salto y voy fuerte a la pelota, él la alcanzó a puntear y ahí lo agarré".
"En el momento no me doy cuenta, pienso que con la amarilla estaba bien. Fui a la pelota, no a lastimarlo. Cuando me saca la roja, no protesto la patada, sino el cambio de tarjeta ya que no hay VAR ni nada de eso", agregó sobre la jugada.
En el mismo sentido, comentó que con la menta en frío, la decisión arbitral fue la correcta: "Hable con el asistente y me lo confirmó. En la cancha uno no sabe. Cuando fui al vestuario y me duche, vi la jugada y esta bien la expulsión".
Posteriormente, el defensor que sufrió su primera tarjeta roja en su carrera, destacó que fue al vestuario de Boca para disculparse "pero ya se lo habían llevado" al Changuito.
"Hablé con (Darío) Benedetto, fue una jugada desafortunada y había que poner la cara. Justo lo agarre a él que fue a cambiar una remera, me hizo pasar con él en el vestuario, pero ya se lo habían llevado", sostuvo.
LEE: Galtier llenó de elogios a Messi: "Agradezco cada momento que tengo para verlo en la cancha"
"Quería pedirle disculpas, que no fue mi intención lastimarlo y el Pipa me agradeció el gesto", destacó.
Pese a su acercamiento y no encontrarlo a Zeballos, Leyendeker no se quedó de brazos cruzados e intentó comunicarse vía telefónica: "Le escribí anoche a un número que me pasaron pero no llegan los mensajes, creo que cambió el número, así que le escribí al papá pero por ahora no tuve respuestas".
"Si me aceptan o no la disculpas pasa a segundo plano, ojalá tenga una buena operación y gran recuperación", agregó con resignación.
Por último, el zaguero recordó las dos roturas de ligamentos que atravesó durante su carrera y reconoció que el delantero deberá "pasar un momento muy duro y feo" pero que le será más sencillo ya que "esta en un gran club".