Como ocurre casi siempre desde 1992, las superestrellas de la NBA marcaron el camino hacia otro Oro Olímpico para el basquetbol de los Estados Unidos. Si bien no fue una cita para nada sencilla, los dirigidos por Gregg Popovich, lograron alzarse una vez mas con la medalla más preciada al derrotar en el partido decisivo a la Francia de Vincent Collet. De hecho, el único invicto del torneo eran los europeos; que incluso en la fase de grupos ya habían vencido al Team USA por 83 a 76 y le arrebataron el primer puesto de la fase inicial.  Luego ambos equipos siguieron por la senda de la victoria hasta llegar a una nueva final olímpica como en Sídney 2000, también con victoria para Estados Unidos.

La final fue un partido bastante parejo, como era de esperarse, en el que Francia comenzó jugando mejor y adelantándose en el marcador. De la mano de sus figuras (Rudy Gobert y Evan Fournier) el conjunto Galo se hizo fuerte en defensa para no dejar lanzar libre a los tiradores norteamericanos y se mantuvo así buena parte del partido. Sin embargo, con Kevin Durant apareciendo de a ratos con su maravilloso juego, con la explosión de Jason Tatum y con el sostén defensivo de Jrue Holiday; Estados Unidos remontó el partido y se fue al descanso ganando por cinco puntos.

Ya para la segunda mitad, los americanos se enfocaron en frenar a las figuras europeas y a liquidar el encuentro con transiciones rápidas al encontrar una defensa muy alta por parte de Francia. Además de aprovechar muy bien el total de 18 perdidas que sufrió el seleccionado Galo y que USA capitalizó a la perfección. Durant con 29 puntos fue el MVP de la final y lo siguieron: Tatum con 19 tantos, Holiday con 11 y Lilliard también con 11. Gobert y Fournier acabaron con 16 puntos cada uno.

De esta manera, se agiganta el poderío y la supremacía del basquetbol estadounidense en los Juegos Olímpicos; y mucho mas aun desde la edición de Barcelona 1992 cuando USA comenzó a llevar ininterrumpidamente a los jugadores que actúan en la NBA.

Justamente, desde esa primera edición de los Juegos Olímpicos en la década del 90, Estados Unidos logró llevarse todas las medallas de Oro a excepción de solamente una: Atenas 2004, cuando la selección argentina lo eliminó en semifinales y luego se alzó con la dorada al vencer a Italia en la final.