Parecía imposible pero ocurrió. Los ex integrantes del cuerpo técnico de Independiente se cruzaron como rivales en Brasil y se saludaron.

Así lo comprobó el informante Comisario de San Alberto recientemente. El preparador físico Alejandro Kohan había sido refractario a cualquier "arreglo".

Recientemente lo relataba esta sección. Decía que el conflicto no tenía salida posible.

Pero en un Sao Paulo - Santos se produjo aquello que parecía un milagro.

"Nos pudimos mirar a la cara como hombres después de años", deslizó Kohan hablando con una radio que escuchó el informante.

Enhorabuena para los simpatizantes del Rojo, siempre pendientes del entuerto.

Recuerdan ellos que cuando se rompió la entente, el equipo empezó a venirse abajo.

Porque más allá de lo que hubiera ocurrido entre ellos, era una sociedad necesaria y productiva.