En pleno crecimiento de la disciplina deportiva y del negocios que la rodea, el pádel mundial atraviesa una crisis sin precedentes: ofertas para extender contratos, jugadores que se asocian para hacer frente a propuestas abusivas, profundas diferencias en las propuestas femeninas que no se condicen con los aires de igualdad de estos tiempos y, como una bocanada de aire fresco, la propuesta de un argentino que entusiasma a los competidores. 

El primer quiebre se generó cuando los jugadores rechazaron la oferta de World Padel Tour para renovar el vigente contrato de exclusividad- La directiva le presentó a los jugadores una propuesta para renovar sus contratos de exclusividad por cinco años una vez finalizado el actual, con fecha del 31 de diciembre de 2023. Es decir, la idea era extenderlos hasta finales de 2028.

El interés tan temprano de World Padel Tour por renovar los acuerdos tiene tres motivos fundamentales: la presencia de un nuevo accionista en el circuito: la asociación por primera vez en la historia de los jugadores y por último la presencia de nuevos inversores dispuestos a dar un golpe de timón y aprovechar los buenos tiempos que pasa el pádel a nivel mundial.  En este último grupo es dónde aparece la figura del argentino Lisandro Borges, empresario del rubro, CEO del Buenos Aires Pádel Master desde el 2016, CEO de América vs Europe y varias empresas mas dedicadas a la fabricación y venta de canchas de pádel y clubes en varios países del mundo.

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El origen de esta crisis comienza cuando la empresa Estrella Damm, responsable del circuito profesional, permite -en mayo pasado- el ingreso como socio con el 20% de la participación accionaria de Rucio Investments, un grupo empresarial con más de 30 años de experiencia en la industria del deporte. Sin embargo, la propuesta contemplaba incrementar esta participación al 51%. Pero para que esto sucediera y la operatoria no volviera a foja cero se dispuso que el World Padel Tour debería firmar imperiosamente la continuidad del contrato con los jugadores. 

El segundo factor de este quiebre en la relación con los jugadores surge después de que los talentosos del pádel hayan decidido unificarse y conformar una asociación de Jugadores, que se concretaría este mes y que se espera cuente con entre 80 y 90 de los 100 mejores ubicados del ránking.

La conformación de esta asociación apuró los tiempos de World Padel Tour que sabe que renovar los contratos no es lo mismo hacerlo en forma individual, que con un grupo unificado y debidamente constituido.

La constitución de esta asociación está ligada al crecimiento global de este deporte en estos últimos años. Las ventas de productos relacionados al pádel subieron exponencialmente (paletas, indumentaria, canchas, etcétera), como así también el consumo del juego en sí. La cuenta es sencilla: hay más dinero en el ambiente, por lo que los deportistas pretenden que se vea reflejado en sus ganancias.

El crecimiento de esta disciplina también motivó que nuevos  fondos de inversión estén interesados en asumir la responsabilidad de comandar el circuito profesional de pádel. Y aquí aparece el nombre de Lisandro Borges quien le ofrece a los jugadores condiciones claras e innovadoras; muy difíciles de rechazar: consiste en darles el 50% del circuito a los deportistas, sumando un fondo de pensión luego del retiro. Tambien se les triplicarán los premios a los deportistas y la transmisión de todos los partidos, algo que tanto jugadores como fanáticos vienen pidiendo hace mucho tiempo.

"Voy a presentar una propuesta donde los jugadores sean dueños de la mitad del circuito y sus ganancias", dijo Borges y agregó que "es un proyecto cuyo fin es que el circuito sea de todos y para todos".

Borges califica la propuesta de inigualable y advierte que tiene más de 23 propuestas internacionales de diversos grupos económicos interesados en organizar las fechas de los torneos, tal como ocurre en el ATP de tenis.

El argentino promete que habrá un antes y un después en el pádel profesional y amateur.

La tensión está lejos de concluir: los jugadores y World Padel Tour aún tienen dos temporadas por delante, y resta más de la mitad del calendario por jugarse.

Los bufets de abogados consultados por los jugadores han determinado que los contratos que el World Padel Tour le hizo firmar a los jugadores son abusivos y fuera de derecho.

Otro tema no menor en los tiempos actuales está vinculado con el circuito femenino, donde la propuesta enviada a las jugadoras resultó insultante. En tiempos de igualdad la oferta fue en términos dinerarios, cuatro veces menor a la de los hombres.

Con todos estos elementos sobre la mesa la propuesta de Borges se encamina a un buen puerto: contiene las mejores condiciones para los jugadores, sin distinción de sexo. 

Por último, la perla de las irregularidades de World Padel Tour, es el acuerdo sellado con CANAL+ hasta 2026, es decir tres años después de la finalización del contrato que tiene con los jugadores y firmado sin el consentimiento de ellos puesto que existe la negativa de firmar la prorroga hasta el 2028.  La relación está en riesgo y la tabla de salvación está en manos de Borges.

Con una innovadora propuesta, un empresario argentino se acerca al manejo del pádel profesional