Un joven de 20 años fue asesinado por al menos dos personas en una parada de colectivos de Wilde, partido bonaerense de Avellaneda, para robarle su celular. 

El hecho sucedió el pasado 18 de julio, en la intersección de las calles Cangallo y De la Peña. Fue luego de que dejara a su novia en su casa, a las 23.30.

Después de eso, Diego Osvaldo Calo fue caminando hasta la parada, donde fue interceptado por al menos dos delincuentes que querían quitarle su celular, el cual se negó a entregarles. 

Frente a su postura, uno de los ladrones lo apuñaló en el pecho varias veces. Las heridas le provocaron un sangrado intenso y mientras estaba consciente, se arrastró por la calle y solicitó ayuda de los vecinos.

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Calo fue trasladado al UPA de Avellaneda, donde fue estabilizado para luego derivarlo al Sanatorio Finochietto. Finalmente, perdió la vida el miércoles pasado a las 11 de la mañana, debido a que su cuadro empeoró.

Interviene en el caso la fiscal Alejandra Olmos Coronel, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial Avellaneda - Lanús.

Los investigadores están detrás de los delincuentes que mataron al joven, quienes se escaparon en sentido hacia Lanús y estiman que serían de Monte Chingolo. 

Quién era Diego Osvaldo Calo, el joven asesinado en Wilde

Calo se desempeñaba como ayudante de albañil. Según dijeron sus familiares en declaraciones televisivas trabajaba desde las 6 de la mañana para sostener la economía de su casa, darse gustos y compartir momentos con su novia. 

Aseguraron que “era un pibe muy bueno que laburaba y vivía para su familia y para su novia”.

El chico era hincha de Independiente, donde había conseguido un empleo en gastronomía, puesto que le generaba alegría ya que estaba dentro del club de sus amores.