El Poder Ejecutivo publicó el protocolo sanitario para la reapertura de iglesias, templos y distintos lugares de culto, donde se podrá recibir a los fieles, pero sin que se desarrollen eventos multitudinarios y sin agua bendita en las fuentes.

Luego de que el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, habilitara días atrás el regreso de las iglesias tras un encuentro con la cúpula de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) en Casa Rosada, se dio a conocer el protocolo que deberán seguir los diferentes credos.

El regreso de la actividad a los lugares de culto no alcanza al AMBA, que sigue en la fase tres de cuarentena, pero sí rige para el resto del país.

"Los lugares de culto pueden permanecer abiertos siempre y cuando sea para que los feligreses y miembros puedan concurrir para requerir asistencia espiritual, con acuerdo previo con el ministro de culto, y realizar oraciones individuales, atendiendo a las disposiciones sanitarias vigentes y tomando los recaudos necesarios de distancia e higiene", establece la guía.

A su vez, se puede concurrir a lugares de cercanía y no estará "permitida la aglomeración de la feligresía y membresía", por lo que se mantienen suspendidas las "ceremonias, celebraciones, conmemoraciones litúrgicas y actos de culto que impliquen la concurrencia multitudinaria de personas".