Varias estaciones de servicio, un local gastronómico y dos heladerías en Rosario recibieron extorsiones en nombre de Los Monos y la situación crítica de la ciudad se acrecienta.

Mientras continúa el temor de los vecinos por los crímenes de cuatro trabajadores en la última semana, la Policía recibió cuatro llamados en los que se denunciaron comunicaciones extorsivas.

Para las autoridades se tratan de hechos que buscan sembrar terror ya que serían delincuentes que no estarían vinculados a la banda narco. 

Los llamados ocurrieron entre las 21 y 22 del martes, una hora antes de que las estaciones de servicio cierren en protesta por el asesinato del playero Bruno Nicolás Bussanich.

Dichos sectores recibieron amenazas de que “iban a balear el lugar si no pagaban una suma de dinero”.

En torno al temor que viven los vecinos, ya se detuvieron a 31 delincuentes que estarían relacionados a los crímenes de los dos taxistas, el colectivero y playero. 

Para mitigar los ataques y resguardar a los vecinos, el Gobierno de Santa Fe abrió la convocatoria para que personal retirado de la Policía se reintegre a las fuerzas.