Esta mañana los madrileños se despertaron con un fenómeno climático inesperado. La ciudad y gran parte de España vieron el cielo cubierto con una gran nube de polvo de arena proveniente del Sahara. Especialistas indican que por los fuertes vientos este clima también llegará en las próximas horas a los Países Bajos y Alemania.

La Agencia Estatal de Meteorología española indicó que este fenómeno es un "extraordinario episodio de calima con reducciones de la visibilidad muy importantes en amplias zonas de la península" y que genera problemas en ciudades que no están cercanas la una con la otra. Por ejemplo, estás postales también fueron vistas en Nantes, Francia y Suiza.

Una nube de polvo de arena proveniente del Sahara cubrió la ciudad de Madrid

En las imágenes captadas por los medios y usuarios de las redes sociales se observa a todos los autos cubiertos con una capa fina de polvo naranja y el cielo sin mostrar señales del sol. Este episodio de fuertes vientos cálidos se lo denomina “Calima” y es bastante común sobre todo en los archipiélagos del atlántico.

Una nube de polvo de arena proveniente del Sahara cubrió la ciudad de Madrid

"Está previsto que continúe llegando polvo en gran cantidad durante lo que queda de hoy y durante mañana, miércoles. En las próximas horas llegará a Países Bajos y Alemania", indicó el servicio meteorológico.

Por la gran cantidad de polvo que cubre gran parte de la superficie de la ciudad, el Ayuntamiento de Madrid activó un dispositivo especial de limpieza, por lo que serán incrementados al máximo los servicios que utilizan agua.

Una nube de polvo de arena proveniente del Sahara cubrió la ciudad de Madrid

Especialistas explican que cuando se genera una tormenta con vientos fuertes en el Desierto de Sahara, las ráfagas generan que se levante polvo y arena del suelo. Luego las partículas mínimas que quedan suspendidas en el aire no pueden bajar y es por ello por lo que se trasladan según la corriente del viento. Las partículas más grandes si descienden y por eso que este fenómeno no produce grandes cambios en las ciudades con su llegada.

Una nube de polvo de arena proveniente del Sahara cubrió la ciudad de Madrid