Choferes de la línea 60 exigen a la empresa que los incluya en el plan de vacunación y que cumpla con la licencia del personal de riesgo, tras la muerte de su compañero Álvaro Pío Santillán, quien falleció a los de 53 años por coronavirus al ser reintegrado a su trabajo luego de haber sido inoculado con una primera dosis.

Los colectiveros de la empresa Monsa (Micro Ómnibus Norte Sociedad Anónima) afirmaron, a través de un comunicado, que el deceso de su compañero, el tercero en lo que va de la pandemia "no fue una desgracia, sino el resultado de una política sanitaria deficiente que arriesga la salud".

En ese contexto, los compañeros del chofer fallecido exigieron "la aplicación de protocolos estrictos, que se licencie al personal de riesgo y que se incluyan a los trabajadores de la actividad en el plan de vacunación".

Pío Santillán se contagió de coronavirus y contrajo la neumonía, que dio lugar a su muerte en el sanatorio Güemes. Sus compañeros, indicaron que en "la primera semana de abril último y por presión de las cámaras empresarias se emitió la resolución conjunta 4/21 de las carteras de Salud y Trabajo, por la que los trabajadores mayores de 60 años y los grupos de riesgo debieron retomar las tareas luego de recibir la primera dosis de la vacuna contra el virus ".

En ese contexto, los delegados y los trabajadores de Monsa  rechazaron la medida, pero hasta ahora "no obtuvieron respuestas" del sector empresario. Aseguran que desde el inicio del brote los conductores implementaron "protocolos propios", por lo que reclaman a la a la patronal "medidas sanitarias".

Los choferes, junto a trabajadores de otras líneas, en semanas previas habían participado de distintas protestas para pedir "el plan de inmunización". En diálogo con el programa "Alguien tiene que decirlo", que conduce Eduardo Feinmann por Radio Rivadavia, el delegado de la Línea 60, Néstor Marcolín, precisó que Santillán, quien estaba afectado de diabetes, dejó huérfanos a cuatro hijos, y la esposa actualmente se encuentra internada por Covid.

Marcolín denunció la maniobra empresaria para "obligar a los trabajadores de riesgo a volver al trabajo", por lo que reclaman que se de marcha atrás la resolución 4 ante la preocupación de todos los choferes afectados.

"Me desperté con seis llamadas perdidas, eran de la esposa de un compañero. Antes de que pudiera responder recibí una llamada más de su hijo que me confirmó lo que imaginaba: Álvaro Pío Santillán, compañero chofer de la cabecera Barracas, falleció en una cama del hospital Güemes a causa del coronavirus ", manifestó Santiago, un chofer de la línea 60 a través de su cuenta de Facebook.

"En la cabecera se repite una escena funesta: trabajadores preguntando qué pasó, trabajadores compartiendo la novedad, trabajadores lamentando la muerte de su compañero. Y bronca, mucha bronca. Es el tercer compañero de la línea que se muere a causa de esta pandemia, y nada indica que no se sigan muriendo otros", denunciaron los colectiveros que siguen pidiendo asistencia en el marco de la pandemia.