“Me ha filmado con un celular”. Esa fue la confesión que desató un caos el fin de semana pasado en el reconocido shopping Hiper Libertad, ubicado en la ciudad de San Juan.

La niña de 10 años salió corriendo del sanitario para alertar a sus padres que un sujeto, que se encontraba escondido en el lugar, la había grabado mientras hacía sus necesidades.

El hombre, identificado como Andrés Reinoso Herrera, terminó casi golpeado, detenido y condenado.

El episodio ocurrió cuando una familia fue a disfrutar del domingo al reconocido centro comercial, ubicado en calle Scalabrini Ortiz y lateral de Av. Circunvalación. La pareja estaba acompañada de sus cuatro hijos, entre ellas dos mejores de 7 y 10 años.

Justamente las niñas, mientras recorrían la tienda, pidieron ir al baño. La madre las acompañó hasta la puerta de los sanitarios, mientras que su esposo e hijo fueron al baño de hombres. Todo estaba absolutamente bien hasta que una de las menores salió del lugar asustada, llorando y gritando, diciendo que un hombre la había filmado. La mujer ingresó y empezó a golpear las puertas hasta que descubrió al pervertido.

El sujeto intentó escapar del shopping, pero fue reducido por el personal de seguridad del establecimiento. Los espectadores casi lo linchan, por eso es que este jueves llegó a Tribunales casi con el rostro desfigurado.

Frente al juez de Garantías, Federico Rodríguez, Herrera sostuvo que comprendía la criminalidad del acto que había cometido.

El informe del psiquiatra, además, reveló que el detenido no posee ninguna discapacidad o enfermedad mental. Por eso el magistrado lo imputó del delito de producción de representaciones sexuales con menores de edad. También le dio 6 meses de prisión preventiva, que los cumplirá en el Servicio Penitenciario de Chimbas, y 1 año de investigación penal.