Más de 3.700 autopartes ilegales, valuadas en unos 23 millones de pesos, fueron secuestradas en 11 allanamientos realizados en locales y domicilios particulares del partido bonaerense de San Miguel y en varios barrios de la Ciudad de Buenos Aires que funcionaban como centros de acopio y comercialización.

Después de más de nueve meses de investigación, la División Sustracción de Automotores, dependiente del Departamento Delitos Contra la Propiedad de la Policía de la Ciudad, pudo llegar a estas propiedades, donde se ofrecían piezas que anteriormente habían sido sustraídas.

Según confirmaron fuentes policiales y judiciales, los dos hombres detenidos y otras seis personas, fueron imputadas por infracción a la Ley 25.761 (comercialización y/o acopio de autopartes ilegales).

Los procedimientos se hicieron en tres gomerías, un depósito de cubiertas y llantas y tres viviendas particulares, donde se hallaron neumáticos, herramientas y accesorios de procedencia ilegal.

Se incautaron 1.712 llantas, 923 cubiertas, 24 ruedas armadas, tuercas de seguridad, ocho llaves cruz y palancas saca tuercas, tres notebooks, tres celulares y documentación relacionada con la compra y venta de neumáticos.

Según se determinó durante la investigación, los integrantes de la banda delictiva robaban neumáticos de vehículos estacionados en la vía pública y luego se los entregaban a dueños de gomerías para que sean ofrecidos a clientes a un costo menor que el original.

Con las llantas, el mecanismo era derivarlas a un taller de reparación y después se colocaban a la venta en diferentes locales.

Siguiendo la misma línea de investigación, miembros de la División Sustracción de Automotores determinó que en un taller mecánico, ubicado en Muñecas al 900, en el barrio de Villa Crespo, en el llamado Corredor Warnes, se habrían acopiado autopartes para ser vendidas ilegalmente como repuestos.

Ante ello, la Fiscalía en lo Penal, Contravencional y de Faltas Número 5, a cargo de Miguel Ángel Ramón Kessler, solicitó el allanamiento.

En este operativo fueron secuestrados: 15 cigüeñales, 20 amortiguadores, 30 ópticas, tres paragolpes, cinco guardabarros, tres capots, tres portones traseros, 24 cubiertas, 17 tapas de cilindros, 42 espejos eléctricos, 14 llantas, ocho ruedas completas y un block de motos, tratándose de piezas usadas sin su correspondiente respaldo legal.

En el último caso, los oficiales llegaron a un taller del barrio de Caballito, en la calle Tres Arroyos al 1.400, que tenía conexión oculta con un amplio galpón lindero.

Entre el casi millar de piezas secuestradas, había 416 paragolpes, 72 puertas, 31 portones traseros, 64 capots y tapas de baúl, 128 guardabarros, 75 ópticas, 47 faros traseros, tres techos solares, un techo completo, 24 radiadores, tres cajas de velocidad, siete tapas de cilindro, 25 torretas con amortiguador y un eje trasero.

Los procedimientos se realizaron en conjunto con personal del Programa de Lucha contra la Comercialización de Autopartes Ilegales, dependiente de la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana.