Cuatro calaveras fueron descubiertas dentro de una valija de una pasajera que viajaba en un micro desde Paraguay hacia Buenos Aires y luego iban a ser enviadas a Estados Unidos para estudios científicos.

Según informaron fuentes oficiales, agentes de Aduana afectados al control de micros internacionales de larga distancia secuestraron cuatro cráneos humanos procedentes de Paraguay cuando un ómnibus cruzaba el Puente Internacional San Ignacio de Loyola para ingresar a Argentina.

En ese momento, el escáner de equipaje mostró una imagen que dejó sin palabras al personal de la Aduana de Clorinda, que no podía creer lo que observaba en la pantalla.

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Así, se procedió al control físico del equipaje en cuestión, propiedad de una ciudadana que viajaba en el micro con destino a Buenos Aires. Disimulados entre sus objetos personales se hallaron cuatro cráneos humanos completos, algunos, incluso, con maxilares y dentadura.

Al ser interrogada por agentes especializados de la Dirección General de Aduanas-AFIP, la mujer manifestó que las calaveras estaban siendo ingresadas a la Argentina para posteriormente ser enviadas a Estados Unidos, donde serían sometidas a estudios científicos.

Argumentó que los profesionales tendían a elegir este tipo de cráneos por estar completos y tener antepasados europeos, lo cual resulta atractivo por su morfología, anatomía y aspectos de interés médico y antropológico, y en algunos casos, también, relacionados a rituales religiosos y de coleccionistas.

El valor de estos objetos en el mercado negro puede ascender a miles de dólares, y por lo general tienden a ser comercializados mediante subastas online.

El hecho constituye una infracción al régimen de equipaje, que contempla los efectos que los viajeros puedan traer para su uso personal o para regalo, siempre que no tengan fines de comercialización y sean admitidos por la vía en cuestión, cosa que obviamente no aplica a restos humanos.

El tráfico de restos humanos involucra desde estudiantes de medicina y análisis científicos hasta ritos religiosos y coleccionistas.