Un entrenador de básquet del club Gimnasia y Tiro de Salta fue detenido como acusado de abusar sexualmente con acceso carnal de un jugador cuando era menor de edad.

El entrenador llamado Mario Aballay, quien llevaba cuatro décadas de trabajo en el club, fue acusado en febrero pasado por un joven de entre 21 y 22 años de haberlo abusado sexualmente cuando tenía entre 12 y 15, y practicaba básquet en la entidad.

Según indicaron fuentes ligadas a la investigación del caso al diario El Tribuno, el joven contó que en primer lugar el entrenador elogió su juego, lo nombró como su "preferido" cuando tenía 12 años y comenzó a buscarlo por su casa para que asista al entrenamiento y llevarlo de regreso una vez concluido.

En ese marco comenzaron las insinuaciones y los tocamientos, hasta que el entrenador concretó finalmente la violación. El mes pasado y luego de varios años, el joven se hizo presente en el lugar de trabajo de Aballay y durante una práctica lo abordó para insultarlo.

"Hijo de puta.. me cagaste la vida, te voy a denunciar para que no sigas cagándole la vida a otros", expresó el joven ante un importante número de presentes poco antes de radicar la denuncia pertinente.

En el momento, Aballay no hizo gesto ni pronunció palabra, aunque luego se presentó ante autoridades judiciales para denunciar al joven por coacción. Sin embargo, la Justicia determinó la detención del profesor, quien quedó con prisión preventiva, alojado en la Alcaidía local como imputado de "abuso sexual con acceso carnal".

La noticia causó un cimbronazo en el mundo de básquet salteño, donde Aballay era un hombre respetado y querido. "No lo puedo creer, sinceramente es de no creer algo así. Fui alumno de él y también como otros tantos papás mis hijos fueron sus alumnos, un tipo muy querido en el club", expresó un alto directivo de Gimnasia y Tiro al mismo medio.

Según trascendió, el joven también apuntó por una presunta complicidad del entonces portero del club, quien ante una seña de Aballay los dejaba solos en una casilla en las que se guardaban pelotas y otros elementos de utilería. En los últimos años, Aballay había dejado de entrenar a las divisiones formativas del club y se quedó con las mayores, tras alegar problemas de salud.

A cargo del caso se encontraba la fiscal penal 3 de la Unidad de Delitos Sexuales (UDIS), Cecilia Flores Toranzos, quien solicitó la prisión preventiva del acusado.